Quién es el dueño de ‘El Oso’, empresa de grasa de zapatos que sus oficinas fueron desalojadas en CDMX

El producto como el nombre de la compañía tienen una importante historia en la sociedad mexicana y de la Ciudad de México

Guardar
Habitantes de la demarcación fueron
Habitantes de la demarcación fueron testigos del desalojo de una de las fábricas más populares del país | Foto: X @elvallemexico / eloso.mx

El pasado viernes 17 de enero se llevó a cabo el desalojo de la fábrica de grasa de zapatos de la famosa marca ‘El Oso’. Esto por un operativo ocurrido en la alcaldía Benito Juárez de la Ciudad de México, sitio donde se ubicaban la compañía de artefactos de cuidado de calzado.

El operativo de desalojo se realizó en la avenida Popocatépetl 145, en la colonia Portales Sur, muy cerca de la estación Eje Central del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro de la capital del país.

El dueño de la popular marca de artefactos de cuidado de calzado, cuyas oficinas se ubicaban en la Ciudad de México, es Alberto Pérez Lozano, quien es el nieto del dueño original. Por lo tanto, representa la tercera generación de la familia que se encarga de la marca ‘El Oso’.

El dueño y abuelo del ahora encargado de la compañía era Don Prisciliano Pérez Buenrostro, originario de Jalpan, Querétaro. A su llegada a la Ciudad de México en el siglo XX, él tenía la inquietud de ofrecer un buen producto para lustrar el calzado de la población en el país.

Lo anterior, debido a que anteriormente, la elaboración de la grasa o betún -como se le conocía en ese entonces- se realizaba calentándola primero en cazos con leña para posteriormente realizar la técnica aplicada.

El dueño actual es nieto
El dueño actual es nieto del fundador, por lo que representa la tercera generación de la familia que se encarga de la compañía. Foto: Sitio web oficial 'El Oso'.

¿Por qué la marca se llama ‘El Oso’?

A su llegada a la Ciudad de México, Pérez Buenrostro era fotógrafo y uno de los lugares que más frecuentaba era el Zoológico de Chapultepec en la Ciudad de México. Estuvo presente cuando el personal del sitio trajo el primer oso polar en dicho parque.

Como se mencionó anteriormente, el hombre quería darle una mejor presentación a la grasa de calzado y realizó su propia marca y producto. Esto lo realizó con la combinación de distintos ingredientes perfectos para la preservación y embellecimiento del calzado y artículos de piel.

Para el año 1918 logra fundar la fábrica, la cual fue constituida formalmente el 6 de enero de 1922 en la Ciudad de México.

La experiencia y emoción que sintió Don Prisciliano junto con el resto de la población de la capital del país al ver al oso, sin mencionar la aportación que dejó, hizo que el nombre de la compañía de grasas para zapatos y demás artículos se llamara ‘El Oso’.

Tanto el nombre como la llegada de este producto tienen una historia importante, tanto para la capital del país como a nivel nacional.

Se desconocen los motivos por los cuales la fábrica fue desalojada. Crédito:X @RaulGtzNR
Guardar