La diputada federal del Partido Revolucionario Institucional (PAN), Ana Isabel González González, solicitó al gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, que reconsidere el reciente aumento en las tarifas del transporte público en el estado, pues esta afecta a miles de usuarios.
Según González González, el aumento tarifario, conocido como “tarifazo”, se da en un contexto donde el sistema de transporte público ya enfrenta serias deficiencias.
Legisladora consideró que este incremento, publicado en el Periódico Oficial del Estado el pasado 5 de enero de 2025, podría tener un impacto negativo significativo en la economía de las familias de la región.
La diputada también recordó que la crisis del transporte público en la zona metropolitana de Monterrey se agravó en agosto de 2024, cuando los transportistas redujeron el número de camiones en circulación debido al incumplimiento del gobierno estatal en el pago a los trabajadores. En ese momento, esta situación dejó a miles de usuarios sin opciones de movilidad adecuadas, agregó.
La diputada solicitó que el gobernador someta a consideración de la Junta de Gobierno del Instituto de Movilidad y Accesibilidad del estado la anulación de las nuevas tarifas.
Además, enfatizó la necesidad de garantizar que los servicios de transporte público sean accesibles, eficientes, sustentables y de calidad, en beneficio de todos los ciudadanos de Nuevo León.
En el caso de México, señaló que las zonas metropolitanas enfrentan desafíos urgentes en materia de transporte público, lo que requiere estrategias de planeación y políticas públicas que promuevan la eficiencia y la sostenibilidad.
Monterrey: un sistema de transporte público reprobado
De acuerdo con el “Ranking de transporte público para ciudades mexicanas 2024″, citado por González González, el sistema de transporte público de Monterrey, capital de Nuevo León, ocupa el segundo lugar entre los peores del país.
Este estudio evaluó aspectos como accesibilidad, eficiencia, equidad, digitalización, institucionalidad, gestión, seguridad y experiencia de viaje, entre otros. Los resultados revelaron que Monterrey obtuvo un puntaje de 6.46 sobre 100 en accesibilidad, reflejando un acceso limitado y de baja calidad a los servicios de transporte.
En términos de equidad, la ciudad alcanzó solo 21.33 puntos de 100, lo que evidencia una falta de acceso igualitario a los servicios de transporte para todos los grupos sociales. En cuanto a eficiencia, el puntaje fue de 27.76 sobre 100, indicando que el sistema no satisface las necesidades de los usuarios.
En general, el sistema de transporte de Monterrey fue calificado como deficiente en todos los aspectos evaluados, incluyendo sustentabilidad y seguridad.