El 9 de diciembre de 2012, un trágico accidente aéreo apagó la voz de Jenni Rivera, una de las figuras más destacadas de la música de banda.
La cantante abordó un LearJet 25 con matrícula N345MC después de un concierto en la Arena Monterrey, con destino a Toluca.
Sin embargo, minutos después del despegue, el avión perdió contacto con los radares, para horas después confirmarse que se había estrellado en la Sierra Madre Oriental, en el municipio de Iturbide, Nuevo León.
No hubo sobrevivientes en el siniestro, que también cobró la vida de su publirrelacionista Arturo Rivera, su maquillista Jacob Yebale, el estilista Jorge Armando Sánchez y su abogado Mario Macías Pacheco.
La causa del accidente fue atribuida a una pérdida de control del avión, posiblemente debido a errores humanos y fallas mecánicas. Las investigaciones señalaron que la aeronave era bastante antigua y había registrado problemas previos.
La Junta Nacional de Seguridad del Transporte de Estados Unidos (NTSB) participó en la investigación, pero no pudo determinar una causa concluyente debido a la destrucción del avión.
La noticia del accidente conmocionó al mundo del espectáculo y sigue resonando en la memoria colectiva.
Durante la más reciente emisión del programa Ventaneando, la periodista de espectáculos Pati Chapoy recordó cómo se enteró de la tragedia.
Según relató, fue su compañero de trabajo, el conductor Pedro Sola, quien le informó del accidente mientras ella viajaba en carretera desde Malinalco.
Chapoy describió el momento como un suceso devastador que impactó profundamente a la televisión y a sus seguidores.
“Fue tremendo y devastador, un accidente de avión horrible. Mucha más gente falleció ahí, fue una cosa muy triste durante un buen rato para la televisión. Hace 12 años recibí una llamada telefónica tuya (de Pedro Sola) avisándome del accidente. Yo venía en carretera de Malinalco y recibí esa noticia de tu parte. Terrible”, recordó la titular del programa de espectáculos de TV Azteca.
A pesar de su prematura partida, el legado musical de Jenni Rivera sigue vivo. Canciones como Con él, No llega el olvido, De contrabando, Amiga si lo ves, Por qué no le calas, Resulta y La gran señora continúan resonando entre sus fanáticos y nuevas generaciones.
Además de su carrera musical, Rivera destacó como empresaria, lanzando su propia línea de ropa y una compañía discográfica. Tras su fallecimiento, su segunda hija, Jacqie Rivera, asumió el control de estos negocios, tomando el relevo de su tía Rosie Rivera.
El impacto de Jenni Rivera en la industria musical y su capacidad para conectar con el público la han convertido en una figura inolvidable. A más de una década de su muerte, su influencia sigue presente, demostrando que su legado trasciende el tiempo y las generaciones.