Exintérprete de Shohei Ohtani fue acusado de desviar millones de dólares del jugador para pagar apuestas y deudas

Un audio de casi cuatro minutos, presentado como evidencia por fiscales federales, revela cómo Ippei Mizuhara, exintérprete y confidente del astro del béisbol Shohei Ohtani, se hizo pasar por el jugador japonés para intentar transferir 200.000 dólares desde su cuenta bancaria. Según informó NBC News, el incidente forma parte de un esquema más amplio en el que Mizuhara desvió casi 17 millones de dólares de las cuentas de Ohtani, fondos que utilizó para apuestas, deudas y compras personales.

De acuerdo con los documentos judiciales, Mizuhara accedió a la cuenta bancaria de Ohtani en Arizona a partir de noviembre de 2021, modificando los protocolos de seguridad para poder autorizar transferencias en nombre del jugador. En el audio, obtenido por el banco y citado por el fiscal adjunto Jeff Mitchell, se escucha a un hombre identificándose como Ohtani y justificando la transferencia de 200.000 dólares como un préstamo para la compra de un automóvil. Cuando la representante del banco preguntó sobre la relación con el destinatario del dinero, el hombre respondió que era para “un amigo”. Según NBC News, esta grabación es una pieza clave en la solicitud de los fiscales para que Mizuhara reciba una sentencia de casi cinco años de prisión.

El acceso de Mizuhara a las cuentas de Ohtani le permitió realizar múltiples transacciones sin despertar sospechas inmediatas. Según la investigación, el exintérprete tenía acceso a la información bancaria del jugador debido a su papel de confianza dentro de su equipo de trabajo. Además, logró sortear los controles de seguridad al modificar detalles en la cuenta, lo que le permitió realizar transferencias sin necesidad de una autorización adicional del propio Ohtani. Los fiscales indicaron que estas maniobras fraudulentas se llevaron a cabo en repetidas ocasiones a lo largo de más de dos años.

El medio NBC News detalló que Mizuhara utilizó los fondos desviados para cubrir apuestas millonarias en deportes como fútbol internacional, la NBA, la NFL y el fútbol americano universitario, aunque nunca apostó en béisbol. Además, gastó aproximadamente 325.000 dólares en tarjetas de béisbol adquiridas a través de plataformas como eBay y Whatnot. Parte del dinero también se destinó a pagar deudas con un corredor de apuestas ilegal y a cubrir gastos médicos.

En junio, Mizuhara se declaró culpable de un cargo de fraude bancario y otro de presentación de una declaración fiscal falsa. Su sentencia está programada para el 6 de febrero, y los fiscales buscan no solo una pena de prisión, sino también la restitución de los casi 17 millones de dólares a Ohtani y una multa de más de un millón de dólares al Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés).

La relación entre Mizuhara y Ohtani iba más allá de lo profesional. Según NBC News, Mizuhara no solo actuó como intérprete del jugador durante momentos clave de su carrera, como el Home Run Derby del Juego de Estrellas de 2021 y sus dos premios como Jugador Más Valioso (MVP) de la Liga Americana, sino que también se convirtió en un amigo cercano y confidente. Incluso, durante el cierre patronal de la MLB en 2021, Mizuhara renunció a su puesto con los Los Angeles Angels para poder seguir en contacto con Ohtani, siendo recontratado una vez que se resolvió el conflicto laboral.

Sin embargo, esta relación de confianza se desmoronó cuando Mizuhara comenzó a desviar los fondos del jugador. Según los fiscales, el esquema de fraude se extendió hasta 2024, dejando a Ohtani como víctima de una traición personal y financiera.

El caso ha generado un impacto significativo en la imagen pública de Mizuhara, quien había sido una figura constante en la vida profesional de Ohtani. El jugador japonés, conocido por su humildad y dedicación al deporte, firmó recientemente un contrato récord de 700 millones de dólares por 10 años con los Los Angeles Dodgers, consolidándose como una de las mayores estrellas del béisbol.

Aunque Ohtani no ha emitido declaraciones públicas sobre el caso, el fraude representa un episodio oscuro en su carrera, que hasta ahora había estado marcada por logros deportivos y una reputación intachable. Según NBC News, los fiscales buscan garantizar que Mizuhara enfrente las consecuencias legales de sus acciones y que Ohtani recupere los fondos desviados.

El escándalo también ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de los deportistas de élite frente a fraudes financieros, especialmente cuando confían en personas cercanas para la gestión de su patrimonio. La magnitud del desfalco y la forma en que Mizuhara accedió a las cuentas de Ohtani han despertado preocupaciones sobre la seguridad de las finanzas de otros atletas de alto perfil.

La grabación presentada como evidencia, muestra cómo Mizuhara intentó justificar la transferencia de 200.000 dólares como un préstamo para un automóvil, una transacción que, según los fiscales, formaba parte de un patrón más amplio de desvío de fondos. La representante del banco, al final de la llamada, pregunta si habrá futuras transferencias al destinatario, a lo que el hombre responde: “Posiblemente”.

Con la sentencia programada para febrero, el caso de Mizuhara sigue siendo un recordatorio de cómo incluso las relaciones más cercanas pueden ser vulnerables a la explotación. Según NBC News, los fiscales están decididos a buscar justicia para Ohtani, no solo a través de la restitución de los fondos, sino también mediante una sentencia que refleje la gravedad del delito.

Mientras tanto, el legado de Shohei Ohtani como uno de los mejores jugadores de béisbol de su generación continúa intacto, aunque este episodio ha dejado una marca en su vida personal y profesional.