Un medicamento contra el cáncer aprobado por la FDA podría frenar el avance del Parkinson

El Parkinson, que afecta a más de 8,5 millones de personas en todo el mundo, es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común después del Alzheimer

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Los investigadores plantean probar el
Los investigadores plantean probar el mecanismo en enfermedades como el alzheimer, vinculadas también a la proteína Lag3. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Un reciente estudio identificó cómo dos proteínas en la superficie de las células cerebrales, Aplp1 y Lag3, trabajan en conjunto para facilitar la propagación de los cúmulos dañinos de alfa-sinucleína, una proteína clave en el desarrollo del Parkinson.

Según informó Science Alert, los investigadores descubrieron que un medicamento aprobado por la FDA para tratar el melanoma, que contiene un anticuerpo contra Lag3, podría bloquear este proceso en modelos animales, abriendo la puerta a una posible terapia para esta enfermedad neurodegenerativa.

El hallazgo, publicado en la revista Nature Communications, fue realizado por un equipo internacional de científicos liderado por expertos de la Universidad Johns Hopkins. Los investigadores explicaron que la interacción entre Aplp1 y Lag3 permite que los cúmulos de alfa-sinucleína ingresen a las células cerebrales, lo que contribuye al avance del Parkinson.

Este descubrimiento no solo arroja luz sobre los mecanismos de la enfermedad, sino que también sugiere que interrumpir esta interacción podría ralentizar significativamente su progresión. “Ahora que sabemos cómo interactúan Aplp1 y Lag3, tenemos una nueva forma de entender cómo la alfa-sinucleína contribuye al avance del Parkinson”, explicó Xiaobo Mao, neurocientífico de la Universidad Johns Hopkins.

La interacción de las proteínas
La interacción de las proteínas Aplp1 y Lag3 facilita la propagación de cúmulos nocivos en el cerebro. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La alfa-sinucleína y su papel en el Parkinson

El Parkinson, que afecta a más de 8,5 millones de personas en todo el mundo, es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común después del Alzheimer. Se caracteriza por ser un trastorno progresivo del movimiento, cuyos síntomas incluyen temblores, rigidez muscular, problemas de equilibrio, dificultades en el habla, alteraciones del sueño y problemas de salud mental. En etapas avanzadas, los pacientes pueden perder la capacidad de caminar o hablar.

La enfermedad está asociada con la muerte o el deterioro de las neuronas productoras de dopamina en la sustancia negra, una región del cerebro encargada del control motor fino. Este daño neuronal se vincula a la formación de cuerpos de Lewy, cúmulos anormales de proteínas compuestos principalmente por alfa-sinucleína mal plegada.

Aunque esta proteína desempeña un papel esencial en la comunicación entre neuronas, su acumulación en forma insoluble puede ser tóxica. Sin embargo, aún no está claro si esta acumulación es una causa directa del Parkinson o simplemente un síntoma de la enfermedad.

El papel de las proteínas Aplp1 y Lag3

En investigaciones previas, se había identificado que Lag3 se une a la alfa-sinucleína y facilita su propagación entre las neuronas, lo que contribuye al avance de la enfermedad. Sin embargo, eliminar Lag3 en modelos animales no detuvo completamente este proceso, lo que llevó a los científicos a buscar otros actores implicados.

El estudio liderado por Johns
El estudio liderado por Johns Hopkins presenta una prometedora vía para ralentizar el deterioro neurológico. (Imagen Ilustrativa Infobae)

En el nuevo estudio, los investigadores se centraron en Aplp1, otra proteína de la superficie celular. Utilizando ratones genéticamente modificados que carecían de Aplp1, Lag3 o ambas proteínas, descubrieron que cada una de estas proteínas puede, de manera independiente, ayudar a las células cerebrales a absorber la alfa-sinucleína dañina.

Sin embargo, cuando ambas proteínas estaban ausentes, la absorción de alfa-sinucleína se redujo en un 90%, lo que sugiere que la interacción entre Aplp1 y Lag3 es crucial para este proceso.

Un medicamento aprobado por la FDA

El equipo de investigación también evaluó el impacto de un medicamento contra el melanoma que contiene un anticuerpo anti-Lag3, conocido como nivolumab/relatlimab. Al administrar este fármaco a ratones, los científicos observaron que bloqueaba la interacción entre Aplp1 y Lag3, lo que prácticamente impedía la formación de cúmulos tóxicos de alfa-sinucleína en las neuronas.

“El anticuerpo anti-Lag3 fue eficaz para prevenir la propagación de las semillas de alfa-sinucleína en los modelos de ratón y mostró mejores resultados que la eliminación de Lag3, debido a la estrecha relación entre Aplp1 y Lag3″, señaló Ted Dawson, otro de los neurocientíficos de la Universidad Johns Hopkins involucrados en el estudio.

Anticuerpo anti-Lag3 usado en cáncer
Anticuerpo anti-Lag3 usado en cáncer muestra eficacia en modelos de párkinson. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Próximos pasos en la investigación

Aunque estos resultados son prometedores, los investigadores subrayaron que aún queda mucho por hacer antes de que este enfoque pueda aplicarse en humanos. El siguiente paso será probar el anticuerpo anti-Lag3 en modelos animales de Parkinson y Alzheimer, ya que investigaciones previas también han señalado a Lag3 como un objetivo potencial en esta última enfermedad.

El avance representa una esperanza para millones de personas que padecen Parkinson, una enfermedad que actualmente no tiene cura. Según consignó Science Alert, este descubrimiento podría marcar un punto de inflexión en la búsqueda de tratamientos efectivos para frenar el deterioro causado por las enfermedades neurodegenerativas.

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