
Uno de los mayores miedos de cualquier persona que viaja, incluso los que viajan frecuentemente y están acostumbrados, es tener problemas con el equipaje y pasar unos días fuera de casa sin la ropa o los elementos básicos de la rutina.
Y, lo peor de ello, es que es relativamente frecuente que en un aeropuerto haya problemas con las maletas, sobre todo con las que se facturan.
La pérdida de la propia maleta, aunque pueda aparecer unos días o semanas después y solamente suponga un retraso, es el inconveniente más común. Aún así también puede suceder que en la cinta de transporte, o en el traslado de las maletas al avión, esta se rompa o sufra daños.
De hecho, y en términos de estadísticas, 1 de cada 125 maletas se pierde, se daña o se atrasa en los aeropuertos españoles, y esto hace que nuestro país esté, en concreto, en el puesto número 9 del ranking de países que más problemas tienen con los equipajes, según los datos de Airhelp.
¿Cómo se debe obrar en estas circunstancias? ¿Es posible hacer una reclamación, y cuáles son las garantías que se ofrecen desde la compañía aérea con la que se haya contratado el viaje para compensar el problema?
Derecho a una recompensa económica de parte de la aerolínea
Los pasajeros que enfrentan problemas con su equipaje durante un viaje aéreo, como daños, retrasos o pérdida, tienen derecho a reclamar una compensación económica a la aerolínea responsable.
Y aunque puede haber ciertas diferencias dependiendo de la empresa y el país en el que suceda el problema, la indemnización estándar puede alcanzar los 1288 Derechos Especiales de Giro (DEG), que son equivalentes a aproximadamente 1608 euros, aunque esta cantidad puede variar dependiendo de las circunstancias específicas del caso, evidentemente.
En situaciones de daños en el equipaje, la compensación se ajusta al nivel de deterioro sufrido, mientras que en casos de retraso, la indemnización se calcula en función de los gastos que el pasajero haya tenido que asumir durante la espera.
Además, existe la posibilidad de recibir una indemnización superior si el viajero realizó una declaración especial de valor del equipaje antes del vuelo y pagó una tarifa adicional por ello. Esto conviene tenerlo en cuenta cuando se programa un viaje largo, por ejemplo, y la maleta va a llevar objetos valiosos.

¿Cómo se inicia el proceso de reclamación?
Por otro lado, para iniciar el proceso de reclamación, es fundamental que el pasajero detecte cualquier irregularidad en su equipaje al momento de recogerlo y solicite el Parte de Irregularidad de Equipaje (PIR) en el mostrador de la aerolínea.
Este documento es esencial para manifestar los daños o la falta de entrega del equipaje. En caso de no presentar este parte, se presume que el equipaje ha sido recibido en buen estado, y por tanto la indemnización podría complicarse.
Otro asunto importante es el del tiempo que se tiene para realizar todo el procedimiento una vez le ha pasado algo a la maleta.
En ese sentido, el plazo para presentar una reclamación varía según el tipo de incidencia. Para daños en el equipaje, el límite es de 7 días desde la recepción del mismo. En casos de retraso, el pasajero dispone de 21 días desde que el equipaje fue puesto a su disposición.
Por último, en cuanto a la pérdida del equipaje, aunque no existe un plazo específico establecido por la normativa, se recomienda presentar la reclamación lo antes posible, especialmente después de los 21 días o cuando la aerolínea confirme la pérdida de forma oficial.