
Alfonso Ortega, conocido en internet como Cocituber, es un creador de contenido gastronómico que se dedica a subir en redes sociales sus visitas a diferentes bares y restaurantes. Sus publicaciones están dedicadas a mostrar distintas opciones para comer, así como a valorar el servicio y la relación calidad-precio de los lugares a los que acude.
En uno de sus últimos vídeos, el influencer ha visitado uno de los restaurantes más famosos de Madrid, al que asegura que no había ido nunca, pero que le habían recomendado en varias ocasiones. En Asador Casa Juan ofrecen una amplia variedad de menús con distintos precios, desde los 80 a los 60 euros. Cocituber decidió escoger el más caro para poder comprobar hasta qué punto la fama del local era merecida o solamente se debía al nombre ya ampliamente difundido.
De hecho, lo primero en lo que se fijó el creador de contenido fue en la decoración del establecimiento: en las paredes tenían colgadas fotografías con distintas personalidades famosas, como Ana Obregón, Pau Gasol o Camela, lo que demuestra que es un restaurante muy conocido.
El menú de Asador Casa Juan
Cocituber entró en el restaurante con muchas ganas de probar el menú y, al principio, la comida estaba mereciendo la pena: aceitunas de aperitivo, chistorra, paté de perdiz con mermelada de cebolla caramelizada... Todo estaba dispuestos para hacer que los clientes “se vayan contentos y sigan teniendo buena fama”.
Al llegar la ensalada de tomate con ventresca y cebolla, el creador de contenido destacó que el tomate no tenía demasiado sabor, pero pronto llegó el jamón, la mus de queso con boletos y el foie de oca a la plancha al vino dulce con pasas, todo ello muy bueno. Sin embargo, Cocituber comenzó a destacar aspectos negativos del servicio: “Son superrápidos en quitarte los platos, incluso demasiado, incluso cuando todavía no has terminado. Creo que un poquito más de calma no les vendría mal”.
Los platos principales no le gustaron especialmente, ya que los consideró “flojos”: los espárragos trigueros, las gambas, las almejas a la marinera... “Ha empezado muy bien y para mí está bajando esto”, explicó. De hecho, no llegó a terminar las almejas porque tenían tierra: “Qué pena, me habían hablado muy bien de este menú. Lo siento, pero no, no continúo con esto”.
La carne, que se hacía en la mesa con una piedra, tenía “una pinta excelente”, pero tampoco pasó el corte del creador de contenido gastronómico: “Se han pasado con la sal mogollón, es que ni aunque la quites. Ya le ha chupado tanto la sal por dentro, que es que no hay quien se la coma. Voy a dejar la carne”.
El postre, una torrija de gran tamaño, sí que le gustó, pero no fue suficiente para cambiar su opinión sobre el restaurante: “Todo es muy completo como para que te vayas contento, pero yo no me voy contento”.
La valoración final de Cocituber
“Voy a seros totalmente sincero, como soy siempre. Si el menú te lo dan como me lo dan a mí, yo no volvería. Con todo mi pesar, no me parece la hostia. Me parece que tiene demasiado nombre para como acabo de comer yo”, destacó el creador de contenido. Pese a que otros comensales que se encontraban en el restaurante sí quedaron satisfechos, Cocituber explicó que, en su opinión “ha habido fallos”, pero que estos “son subsanables”.