Los hábitos que tienes que evitar desde ya si quieres ser feliz en tu jubilación

Además de mantenerse activos físicamente y cuidar de la salud, hay una serie de aprendizajes que ayudarán a disfrutar más

Guardar
Los hábitos que tienes que
Los hábitos que tienes que evitar desde ya si quieres ser feliz en tu jubilación (Adobe Stock)

Mucha gente encuentra la motivación que necesita en su día a día - eso de trabajar y seguir trabajando - en la idea de la jubilación. Hay pocas épocas tan deseadas como esos años de descanso después de toda una vida de esfuerzo, por lo que muchas personas pasan la vida ahorrando (si se lo pueden permitir) y planeando de cara a tener el mejor retiro que les sea posible. Una casita en el campo, un apartamento en la playa, una autocaravana para amanecer cada día en un nuevo sitio, o simplemente quedarse en casa y disfrutar de unos años de tranquilidad junto a su familia o compañero de vida.

El problema de todo esto es que ese descanso llega cuando el cuerpo se ha empezado a debilitar, y cabe la posibilidad de que, cuando el momento acaba por llegar, no se pueda - no se quiera - hacer todo lo que se había planeado. Hasta cierto punto, si a lo largo de la vida se ha mantenido cierto grado de actividad física y cuidado de la salud, se podrán paliar algunos de los efectos inevitables del paso del tiempo. Pero no es lo único que se puede hacer para disfrutar de una mayor plenitud durante esos años de jubilación: recientemente, Vanitatis ha compartido una serie de consejos que, aparentemente, podrán mejorar la calidad de vida durante esa época. Concretamente, aseguran, la clave está en abandonar ciertos hábitos aparentemente inofensivos que, en realidad, dificultan el bienestar, independientemente de la etapa vital.

Los hábitos que tienes que
Los hábitos que tienes que evitar desde ya si quieres ser feliz en tu jubilación (Freepik)

Los hábitos que abandonar para disfrutar más de la jubilación

El primero de los consejos es abandonar el convencimiento de que existe cierta edad en la que ya no se puede aprender o empezar algo nuevo. Eso de asumir que “ya es tarde” solo alimenta el estancamiento. Es verdad que la vida hace de las suyas y puede pesar, pero los años traen consigo sabiduría y perspectiva, dos aspectos esenciales para abrirse a nuevas experiencias, a aprender nuevas habilidades, o encontrar nuevas pasiones.

También indican la importancia de dejar de vivir anclados al pasado. Es natural, claro, eso de sentir nostalgia, pero tratar de quedarse ahí, en lo que fue, impide apreciar con plenitud el presente. Es esencial, por esto mismo, aprender a aceptar los cambios, aunque no siempre sea fácil, ya que esto permitirá adaptarse mejor a la realidad y descubrir, desde ahí, nuevas formas de disfrutar.

En la misma línea, insisten en lo esencial de aprender a soltar el rencor. Cargar con emociones negativas sólo hará por cargar más la espalda, afectando el equilibrio emocional. No quiere decir que uno deba olvidar su pasado, sino aceptar esas vivencias para liberar espacio interior. Ser agradecidos con lo que se tiene también es importante, ya que así es como se aprende a valorar lo cotidiano, lo que con toda probabilidad cambiará la perspectiva vital.

Del mismo modo, es muy importante no abandonar los hobbies, sea cual fuere. Continuar haciendo lo que se disfruta solo puede tener un impacto positivo en el bienestar emocional y mental. No quiere decir que solo pueda seguir haciéndose lo que ya se conoce, claro: explorar nuevas aficiones también será igualmente positivo. Porque lo dicho: nunca es demasiado tarde.