
En España, la jubilación es un derecho que cada trabajador puede ejercer de acuerdo con su situación personal, pero no constituye una obligación estricta. Aquellos que así lo deseen pueden continuar trabajando más allá de la edad legal de retiro, sin un límite establecido para alargar su vida laboral. Además, la Administración ofrece incentivos para quienes opten por retrasar su jubilación, premiando el aplazamiento de la retirada con mejoras económicas.
El aumento de la esperanza de vida, junto con la incertidumbre sobre la viabilidad futura de las pensiones públicas, ha llevado a la implementación de políticas que fomentan el retraso de la jubilación. En este contexto, los cambios legislativos propuestos no solo buscan extender la edad de jubilación ordinaria, sino también permitir que cualquier ciudadano que cotice a la Seguridad Social pueda seguir trabajando por el tiempo que decida, adaptando su futuro a sus propias necesidades económicas y personales.
La jubilación voluntaria demorada: ¿Cuánto puedo retrasar mi retiro?
Como explica la revista de la Seguridad Social, "La jubilación voluntaria demorada es la posibilidad reconocida a las personas trabajadoras (por cuenta propia o ajena) de que, una vez cumplida la edad ordinaria de jubilación prolonguen su vida laboral, por lo que podrán acceder a una serie de beneficios en su futura pensión de jubilación". Se trata de la manera más común de retrasar la jubilación, junto con la jubilación parcial o la jubilación activa.
Aquellas personas que opten por retrasar voluntariamente su jubilación de esta forma, pueden beneficiarse de un complemento económico al momento de decidir retirarse. Existen dos formas de incentivo:
- Un porcentaje adicional del 4% por el primer año completo cotizado después de alcanzar la edad ordinaria de jubilación, y del 2% por cada seis meses adicionales a partir del segundo año, lo que resultará en un aumento de la pensión mensual.
- Un pago único por cada año cotizado, cuyo importe varía según los años de cotización previos a la jubilación y oscila entre los 5.000 y los 12.000 euros aproximadamente, el cual se recibe en el momento de la jubilación.
Hay que tener en cuenta que la Seguridad Social no establece un límite máximo de edad para la jubilación. Esto significa que, una vez superada la edad legal de retiro, que varía dependiendo de las circunstancias de cada individuo, los trabajadores pueden optar por seguir trabajando sin que el sistema público imponga restricciones en cuanto a la edad. Así, es posible continuar cotizando y retrasar la jubilación de forma voluntaria, adaptando la fecha de retiro a las necesidades y preferencias de cada persona, siempre y cuando cumplan con los requisitos establecidos para seguir en activo.
Requisitos para acceder a la jubilación demorada
Para acceder a a este tipo de jubilación y su incentivo, es necesario haber alcanzado la edad legal para jubilarse y haber cumplido con el período mínimo de cotización requerido, que actualmente es de 15 años.
En 2025, la edad ordinaria de jubilación es de 66 años y 8 meses para aquellos con menos de 38 años y 3 meses de cotización. Para quienes hayan cotizado 38 años y 3 meses o más, la jubilación ordinaria podrá ser solicitada a los 65 años.