
Para acceder al puesto de trabajo ofertado en el portal de empleo de una empresa, el candidato deberá superar una de las pruebas temidas de todo el proceso de selección: la entrevista de trabajo. En esta conversación de carácter formal, los reclutadores o el personal del departamento de Recursos Humanos (RR. HH.) de la compañía tratarán de hallar al aspirante que mejor se adapte a las condiciones del puesto, siempre y cuando cumpla con los requisitos formativos y profesionales, y que mejor encaje con los valores de la empresa.
Se trata de un proceso de comunicación bidireccional en el que el candidato también puede -y debe- preguntar a los reclutadores sobre las condiciones de la oferta (salario, funciones, lugar de trabajo, opciones de desplazamiento, etc.), con el objetivo de ordenar toda la información disponible.
Unas condiciones inapropiadas
Las entrevistas de trabajo no solo sirven para saber si te gustaría trabajar para una determinada empresa, sino también para todo lo contrario. Durante el encuentro, ya sea presencial o por vía telemática, el aspirante puede descartar el puesto de trabajo si no le gusta lo que escucha.
Esto es lo que le sucedió a un usuario de Reddit, que utilizó la red social para relatar la situación que presenció en una entrevista laboral. Según ha informado el medio alemán Focus, este individuo había investigado previamente a la empresa, constatando que “la descripción del puesto parecía excelente, el salario era decente y la empresa tenía buenas críticas”. Todo iba por buen camino, hasta que llegó el momento de acudir a la entrevista con el personal de RR. HH.
Todo se torció cuando escuchó la primera pregunta del entrevistador: “¿Cómo lidias con las horas extra no pagadas?" En un principio, este usuario de Reddit reaccionó internamente, pensando que las palabras del gerente “eran broma”. Desgraciadamente para él, el encargado de la empresa añadió que las horas extra no estaban remuneradas, confirmándole que la pregunta era bastante real.
‘Presión’ de hacer horas extra
Otro aspecto valorado negativamente por el candidato fue la respuesta que recibió sobre la obligatoriedad de hacer horas extra. “Bueno, esperamos que nuestros empleados se queden el tiempo que sea necesario para hacer el trabajo. Aquí todos somos apasionados por nuestro trabajo y no contabilizamos las horas extra”, le contestó el reclutador.
Minutos después de iniciar la entrevista de trabajo y tras comprobar que sus horas extra no serían recompensadas económicamente, el candidato se puso en pie e informó a su interlocutor que no era la empresa correcta para él. Se marchó de la entrevista en tiempo récord.
Ahora, en su perfil de Reddit, ha preguntado al resto de usuarios si su reacción fue la adecuada o si, por el contrario, debería haber permanecido hasta el final para “aprender más sobre el puesto”. Quedarse hasta el final de la entrevista de trabajo hubiera demostrado profesionalidad y, sobre todo, respeto hacia la otra persona, aunque las condiciones de la oferta no fueran de su agrado. No obstante, si la empresa no compensa las horas extra trabajadas económicamente o con días libres, estaría incurriendo en una infracción de la normativa laboral, tal y como está estipulado en el Estatuto de los Trabajadores de España.