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El Congreso de los Diputados aprobó el pasado mes de enero la nueva reforma de las pensiones que modifica la jubilación parcial, activa y demorada y con la que se facilita -aun más- trabajar a los jubilados.
Una de las medidas que introduce el Real Decreto-ley 11/2024, de 23 de diciembre, afecta directamente a la jubilación demorada, que es la que permite a las personas trabajadoras (por cuenta propia o ajena) que, una vez cumplida la edad ordinaria de jubilación prolonguen su vida laboral, accediendo a una serie de beneficios en su futura pensión de jubilación.
Entre las principales novedades, destaca el incremento del incentivo por demora a partir del segundo año de retraso en la jubilación. Es decir, el complemento económico durante el primer año será el mismo (un 4% anual) y a partir del segundo año se aplicará el aumento por cada periodo de seis meses adicionales trabajador (es decir, sin necesidad de completar un año completo para acceder a un porcentaje extra de bonificación, como se hacía hasta ahora). Además, se ha establecido la posibilidad de compatibilizar el cobro del complemento por demora con la situación de jubilación activa, lo que amplía las opciones para quienes deseen seguir trabajando mientras perciben este beneficio.
Cuánto subirá la pensión por cada año de demora
Como explican desde el Instituto BBVA de Pensiones, a partir del segundo año de demora, los trabajadores podrán recibir un incremento del 2% en su pensión por cada periodo de seis meses adicionales. Para ello, los beneficiarios podrán optar entre tres modalidades de incentivo:
• Incremento porcentual en la pensión: Se añade un máximo de un 4% anual a la base reguladora, calculándose de forma proporcional para periodos inferiores a un año. Este aumento no puede superar el tope de la pensión máxima; en caso de alcanzarlo, se abona una cantidad adicional anual basada en el porcentaje no aplicado.
• Pago único: Se asigna una suma a tanto alzado, cuyo importe depende de la cuantía de la pensión y del periodo cotizado, beneficiando especialmente a quienes cuentan con carreras de más de 44 años y 6 meses.
• Modalidad mixta: Combina el incremento porcentual y el pago único. Los jubilados que opten por esta fórmula reciben un aumento del 2% anual (o 1% proporcional para periodos inferiores a un año) junto a un pago único equivalente a la mitad del que correspondería en la opción íntegra. Para retrasos de 11 años o más, se aplica un pago único por los primeros 5 años y un 4% adicional por cada año extra.
Este cambio elimina la necesidad de esperar un año completo para acceder a un aumento en los incentivos, lo que representa una mayor flexibilidad para los trabajadores que decidan prolongar su vida laboral.
Requisitos para acceder a la jubilación demorada
Para acceder a a este tipo de jubilación y su incentivo, es necesario haber alcanzado la edad legal para jubilarse y haber cumplido con el período mínimo de cotización requerido, que actualmente es de 15 años.
En 2025, la edad ordinaria de jubilación es de 66 años y 8 meses para aquellos con menos de 38 años y 3 meses de cotización. Para quienes hayan cotizado 38 años y 3 meses o más, la jubilación ordinaria podrá ser solicitada a los 65 años.