Ya ofrecimos algunas claves acerca de cómo pedir un aumento de sueldo de la mano de Emily Epstein, de la Universidad de Harvard y una de las voces más autorizadas a escala mundial. Y pese a que se trata de una situación que se plantea cuando un trabajador ya lleva un tiempo en la empresa -comúnmente no menos de un año-, Epstein pone el foco en la propia negociación, en la entrevista de trabajo, al ser cuando se establecen las condiciones que son el punto de partida de futuras mejoras. Cuanto más ambicioso sea ese suelo, más lo serán las futuras revisiones, apunta la experta. En sus propias palabras, “quienes no piden más corren el riesgo de dejar una gran cantidad de valor sobre la mesa”.
La pregunta ahora entonces es cómo afrontar esa entrevista para que se resuelva de forma positiva. Para continuar con profesionales que conocen la materia, turno ahora de Samuel Pimentel, presidente ejecutivo de Ackermann Internacional, quien recientemente ha publicado El headhunter (LID editorial), un libro en el que repasa su vida y el de su consultora, una startup que escaló hasta ser hoy en una multinacional de búsqueda y selección de directivos. De la experiencia de Pimentel se extraen, entre otras enseñanzas, la forma en que un aspirante debe sentarse ante un empleador con la máxima confianza en sus posibilidades, lo que pasa primero por un buen currículum, pero no solo.
Consejos para superar una entrevista de trabajo
Estas son algunas de las recomendaciones de Samuel Pimentel para superar con éxito una entrevista de trabajo, pero también otras sobre lo que no se debería hacer:
1. Prepárate a fondo
- Deberías: antes de la entrevista, investiga sobre la empresa, su cultura, sus valores y su estrategia. Conocer sus productos o servicios es importante, pero lo fundamental es entender su visión y cómo puedes contribuir a sus objetivos. “Esta preparación -remarca Pimentel- marcará una diferencia y, además, te dará confianza y ayudará a generar una conversación más fluida”.
- No deberías: acudir sin información sobre la empresa. La falta de preparación refleja desinterés y puede dar una mala impresión al entrevistador.
2. Muestra entusiasmo genuino
- Deberías: expresa interés real en el puesto y en la empresa. Comparte ejemplos concretos sobre por qué te interesa la posición y cómo podrías aportar valor. La actitud positiva y el lenguaje corporal también juegan un papel clave.
- No deberías: mostrarte apático o dar la impresión de que buscas cualquier trabajo sin importar la empresa o el rol. La falta de energía es perceptible y resta posibilidades de ser seleccionado.
3. Sé claro y conciso
- Deberías: responde de manera precisa, centrándote en la relación entre tu experiencia y el puesto. Utiliza ejemplos concretos de tu trayectoria para respaldar tus habilidades y logros.
- No deberías: hablar en exceso o desviarte del tema. Las respuestas largas y vagas pueden hacer que el entrevistador pierda interés en tu perfil.
4. No te limites al currículum
- Deberías: la entrevista es una oportunidad para contar tu historia. En lugar de repetir lo que ya está escrito en tu currículum, ilustra tu experiencia con anécdotas y ejemplos que reflejen tus habilidades y personalidad.
- No deberías: recitar tu currículum sin aportar contexto ni mostrar cómo has desarrollado tus competencias en experiencias pasadas.
5. Prepárate para preguntas difíciles
- Deberías: anticipa preguntas sobre tus debilidades o desafíos enfrentados en el pasado. Muestra cómo los has superado y qué has aprendido de esas experiencias.
- No deberías: esquivar o improvisar respuestas en el momento. La falta de preparación en estas preguntas puede jugar en tu contra.
6. Formula preguntas relevantes
- Deberías: demuestra interés haciendo preguntas inteligentes sobre la empresa y el puesto, como los retos actuales del equipo o las oportunidades de crecimiento dentro de la organización.
- No deberías: preguntar por salario, beneficios o vacaciones en la primera entrevista. Estas dudas pueden abordarse más adelante en el proceso de selección.
7. Sé honesto y auténtico
- Deberías: expresa tus fortalezas con confianza y reconoce áreas en las que aún puedes mejorar. La autenticidad genera confianza y ayuda a construir una relación sólida con el entrevistador.
- No deberías: exagerar tus logros o intentar aparentar algo que no eres. La falta de sinceridad puede ser detectada y afectar tu credibilidad.
8. Genera empatía con el entrevistador
- Deberías: busca puntos en común y demuestra una actitud cercana y respetuosa. La comunicación efectiva y un ambiente de confianza pueden ser determinantes en la decisión final.
- No deberías: mostrarte distante, arrogante o poco empático. Recordar que el entrevistador también es una persona y que la conexión interpersonal es clave puede ayudarte a destacar.
Recomendaciones adicionales
Además de estas indicaciones, hay otros aspectos que no por más pequeños pasan inadvertidos en una entrevista de trabajo y pueden terminar de decantar la decisión del empleador:
- Llega relajado, pero atento: una actitud positiva genera una mejor impresión.
- Mantén un lenguaje corporal adecuado: contacto visual, postura abierta y una sonrisa pueden transmitir seguridad y confianza.
- Escucha con atención: evita interrumpir y responde de manera clara y precisa.
- Agradece la oportunidad: al finalizar, muestra gratitud por el tiempo del entrevistador y reafirma tu interés en el puesto.