El debate sobre qué hora es la mejor para cenar siempre trae opiniones divididas. Sin duda es una de las grandes incógnitas y, dependiendo del país en el que vivas, la famosa hora de cenar puede variar.
Un ejemplo de esto es Reino Unido, país en el que el horario establecido suele oscilar entre las 18:30 y las 20:00. En España, en cambio, la costumbre marca que la hora de cenar suele ser entre las 21:00 y las 22:30.
También puedes seguirnos en nuestro canal de WhatsApp y en Facebook
Sin embargo, pese a lo que pueda establecer nuestra cultura o los propios estereotipos, la ciencia y los expertos en la materia ya se han pronunciado.
Momento idóneo
¿Realmente hay una hora en la que sea más beneficioso cenar? Según afirma Vater Longo, director del Instituto de Longevidad de la Universidad del Sur de California, es que debemos terminar de comer 3 horas antes de irnos a dormir. Por lo que, si tu hora habitual para dormir es las 23:00, deberías terminar de cenar a las 20:00.
Y es que comer demasiado tarde puede cambiarte los hábitos. “Si retrasas cada vez más la cena, el mensaje que recibe tu sistema es que debes seguir activo”, afirma el experto. De esta manera, el ciclo del sueño se puede ver alterado si, cada vez, cenas más tarde.
Otro de los puntos que debemos tener en cuenta es el tiempo de ayuno que pasamos entre la cena y el desayuno del día siguiente. Y es que, es el periodo del día en el que más tiempo pasamos sin comer.
¿Tiene sentido hacer un desayuno fuerte y una cena ligera?
Son varias las personas que afirman que la cena debe de ser ligera, mientras que el desayuno debe de ser más fuerte. Sin embargo, Adam Collins, profesor asociado de nutrición en la Universidad de Surrey, discrepa.
“Es bastante difícil tomar un desayuno abundante porque simplemente no tienes hambre”, afirma el experto, basándose en que el cuerpo ha empezado a expulsar glucosa en sangre. Y, dado que la gente suele merendar poco, es normal que la cena sea algo más fuerte.
No hay que alarmarse por ello, siempre y cuando se deje un periodo de descanso entre la cena y la hora de dormir. Pero debemos atender a nuestro patrón general de comidas. Si cenamos temprano pero luego nos sentamos en el sofá y cogemos un tentempié, de nada sirve haber cenado antes.
No podemos poner horarios estrictos, pues probablemente no se cumplan. La clave está en encontrar el equilibrio. Si se hace ejercicio de cardio o de fuerza como levantamiento de pesas, una cena abundante, rica en carbohidratos y proteína, puede ser la mejor opción para tener una buena recuperación.
En definitiva, Longo afirma que todas las comidas deben de estar en un periodo de 12 horas a lo largo del día y que hay que dejar un intervalo de 3 horas entre la cena y la hora de dormirse. “Si cenas más y duermes bien, tu colesterol y presión arterial están bien, entonces estás bien”.