Tanto en España como en muchos lugares del mundo, la libertad de opinión y expresión son la garantía básica para que cada uno de sus ciudadanos puedan ser libres para decir o hacer lo que quieran. De este modo, tanto la constitución como los diferentes marcos normativos publicados posteriormente, han incluido en su interior artículos para intentar erradicar, o al menos minimizar, cualquier tipo de discriminación que se pueda producir.
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Esta discriminación se puede dar, por ejemplo, en el lugar de trabajo, donde una determinada ideología o incluso una forma de ser pueden acabar provocando remuneraciones insuficientes, falta de promoción o, incluso, el despido. A raíz de esto, empleados o exempleados pueden acudir a los tribunales para pedir que se haga justicia, lo que en ocasiones deviene en reincorporaciones o, también, en importantes sumas de dinero.
Más de 100.000 euros de indemnización
Es a raíz de un proceso judicial que una mujer estadounidense cobrará 105.000 dólares en pagos atrasados y daños y perjuicios por parte de J&M Industries Inc., la empresa donde estuvo 20 años trabajando. Una suma pocas veces vistas, que en euros alcanzaría la cifra de los 100.000. La razón de esta cuantía tan grande es un despido que se produjo cuando ella se negó a jubilarse, pese a tener 65 años.
De este modo, la demanda presentada por la Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo de Estados Unidos denunciaba que esta mujer había sido despedida por discriminación a raíz de su edad, lo que suponía una violación de las leyes federales en el estado de Louisiana.
Los hechos se produjeron a raíz de una pregunta de su superior, el cual, directamente, le preguntó por qué no dejaba de trabajar con su edad. “Después de decirle a la empresa que no tenía planes de jubilarse, la empresa le informó de que su puesto de agente de compras iba a ser eliminado debido a la incertidumbre económica”, explican desde la Comisión en un comunicado. “Menos de un mes después de despedir a la empleada, la empresa contrató a un hombre de unos treinta años”
Un final “de interés público”
Según han informado medios como Business Insider o el Miami Herald, desde J&M Industries aseguraron que el nuevo empleado tenía “funciones más amplias y significativas que ella”, por lo que no se trataba de un despido producido por edad. Respecto a las preguntas del superior de la mujer, afirmaron que se trataban de “comentarios sueltos” precedidos por una planificación previa de su sustitución.
A pesar de estas explicaciones, el departamento de Justicia del Estado firmó un Decreto de Consentimiento con la empresa, que se verá obligada a afrontar ese pago, revisar sus políticas, realizar capacitaciones y proporcionar informes regulares a la Comisión. “Esta resolución sirve al interés público”, destaca Rudy Sustaita, uno de los abogados de la Oficina del Distrito de Houston, mientras que otros letrados de otros estados han hecho hincapié en condenar la discriminación por edad. “Los empleadores que discriminan a los trabajadores mayores violan la ley”, destaca Peter Theis, abogado de una oficina en Nueva Orleans.