La hostelería se consolida como uno de los pilares económicos de España, según revela el Anuario de Hostelería 2024. Durante 2023, el sector mantuvo más de 300.000 establecimientos en funcionamiento, empleó a 1,7 millones de personas y alcanzó una facturación de 157.379 millones de euros, equivalente al 6,7 % del Producto Interior Bruto (PIB) nacional.
La importancia del sector en el país es evidente. Sin embargo, esto no se traduce en un cuidado especial de los trabajadores. Todo lo contrario. Las jornadas laborales que exceden el límite legal, el impago de horas extra, los bajos salarios y los malos tratos por parte de clientes y empleadores, son el día a día de los camareros y camareras en España. Además, las redes sociales les han traído una nueva preocupación: la presión por recibir comentarios negativos en plataformas como Instagram, Tiktok o las reseñas de Google.
Jesús Soriano, conocido en redes sociales como Soy Camarero, se ha convertido en una de las voces más influyentes en la defensa de los derechos de los trabajadores de la hostería. A través de sus perfiles en X, Instagram y TikTok, denuncia prácticas como las largas jornadas laborales, el impago de horas extra y la ausencia de días libres. Además, también analiza las reseñas que reciben bares y restaurantes por parte de sus clientes a través de plataformas en línea.
La última denuncia de ‘Soy camarero’
“La respuesta es impecable”, asegura Soriano en una de sus últimas publicaciones en X. En esta ocasión, un cliente había dado una puntuación de uno sobre cinco a El 24 Café Bar. Además, decidió justificar su calificación. “Sinceramente decepcionado. Por las mañanas me atiende un señor muy amable, pero he llegado a las 4:10, dice que ya no había menú y a cambio me he ido pagando una comida de €”, explica.
Pero el propietario del local también ha querido dar su versión. “Nunca puso la de 5 estrellas por el buen servicio de las mañana y la atención que se tuvo con usted”, escribe. “Pero un lunes, pasadas las 16 horas, al no tener ya menú del día (por haberse agotado a esas horas), y comer de la carta (Ensaladilla ahumada con langostinos, lomo de vaca 300 gs trinchado con su guarnición, pan, bebida, crujiente de manzana y otro postre para otro comensal, un coulant de chocolate), entonces sí pone una reseña totalmente negativa y dañina”, apunta.
“Por respeto y educación, voy a obviar el resto de detalles tras la comida Si usted considera justa la respuesta, deje la reseña de 1 estrella, si piensa que es excesivo el daño gratuito, rectifique”, concluye.
La reacción de los usuarios
Una vez más, han sido muchos los usuarios que han compartido su indignación sobre este tema: las reseñas de Google pueden dañar gravemente la imagen de un establecimiento, por lo que es importante que los clientes piensen dos veces antes de escribirlas. Por otra parte, muchos usuarios han aplaudido el comportamiento del propietario del local. “Mucha clase”, “impecable”, dicen los usuarios.