Ubicado en el barrio de Sant Antoni del distrito barcelonés del Ensanche, existe un antiguo restaurante que fue, además, el escenario de uno de los grandes cambios en la esfera deportiva española: Bodega Sepúlveda. Lo contó, en su día, el propio (ex) entrenador del F.C. Barcelona, Pep Guardiola cuando almorzó junto a Joan Patsy, ciendo garbanzos y costillitas de cordero en la Bodega Sepúlveda: “(Estábamos) en la mesa del balcón, disfrutando como siempre, ya sabes... Y va y me suelta (Patsy): ‘En la próxima temporada Frank no va a estar y el entrenador, que lo sepas, vas a ser tú‘”.
Aunque en ese momento no era oficial, Patsy ya había hablado con el presidente Joan Laporta y Johan Cruyff, su consejero: “Evidentemente, Pep me dijo que estaba loco y siguió comiendo; no me hizo ni caso”, lo mismo por no creerse lo que Joan le estaba contando o, quizás, por estar disfrutando intensamente de su plato de garbanzos estofados con butifarras y morcilla, sin ser capaz de mostrar interés por nada más.
La carta de Bodega Sepúlveda: ensaladas, carnes, mariscos, y huevos
Además de ser el lugar en el que Pep Guardiola supo que sería el nuevo entrenador del Barça, Bodega Sepúlveda se trata de un histórico restaurante, fundado en 1953 y especializado en la cocina de mercado, que combina platos tradicionales y tapas. Según la página web del propio restaurante, trabajan “con productos frescos y de proximidad, con una selección de más de 100 vinos con denominación de origen para ofrecerte tapas y platos tradicionales que describen la esencia de Cataluña”.
Destacan, entre varios otros, sus platos de croquetas de setas y chipirones, así como los huevos fritos con bigotes de bogavante salteados, aunque tiene una amplia oferta de productos: su carta de entrantes, por ejemplo, incluye opciones desde los 2,10 euros por cada unidad de croqueta de chipirón hasta los 14,50 euros de su cecina de “león” o su coca “Sepúlveda”. También cuenta con varias alternativas de platos de pescado y marisco, con precios desde los 3,25 euros (por unidad) de sus sardinas en escabeche hasta los 25 euros de su ´bacalao a la llauna'.
Adicionalmente, ofrecen una variedad de platos de carne, desde entrecot de Nebraska (350 gramos por 33,50 euros) hasta los pies de cerdo estofado (14,50 euros), pasando por sus peculiares albóndigas con boletus (por 16 euros) o su solomillo de ternera al café de París (por 27 euros).
También destacan sus platos de huevos, sencillos pero confiables, desde el clásico de huevos fritos con jamón ibérico (13 euros) hasta la alternativa más particular de huevos fritos con “bigotes” de bogavante salteados (23 euros).
Pero lo más destacable de este restaurante es, quizás, esa larguísima carta de más de cien vinos de denominación de origen, con precios que varían desde los 18 euros la botella hasta los 70, y de todos los tipos: blanco, rosado, negro, espumoso, cava y champán.
Este restaurante, ubicado en el número 172 de la Calle Sepúlveda, abre sus puertas de martes a jueves tanto para el almuerzo, desde las 13h hasta las 16:30h, como para cenar, desde las 20h a las 00h. Los viernes y sábados, por su parte, el local cierra media hora más tarde, a las 00:30h; y los domingos y lunes permanece cerrado.