Casarse en España ya es más caro que nunca. Y es que el precio medio de las bodas ha alcanzado los 23.750 euros (sin contar el viaje de novios o los anillos de compromiso), lo que supone un aumento del 13% respecto a 2023, según el Informe del Sector Nupcial 2024 de Bodas.net. En este sentido, España es el segundo país que más gasta en darse el “sí quiero”, solo por detrás de Estados Unidos.
Según los últimos datos disponibles del Instituto Nacional de Estadística (INE), durante 2023 se casaron 172.430 parejas, lo que supone una disminución del 3,7% respecto a 2022 (que consiguió la cifra más alta desde 2008). Aunque no se sabe con certeza si esta disminución está relacionada con el incremento de precios, lo cierto es que se ha impulsado la búsqueda de formas de ahorrar en estas ceremonias, evitando que organizar una fiesta tan especial para algunas parejas se convierta en una pesadilla económica frente al altar.
Cuál es el mes más barato para casarse
Una de las principales maneras de ahorrar en una boda es elegir una buena fecha. Es popularmente conocido que en temporada baja (entre noviembre y marzo) es más fácil organizar un enlace nupcial con un coste reducido. Desde Bodas.net explican a Infobae España que, aunque en los últimos años ha habido cierta desestacionalización, los meses de invierno continúan siendo considerados como una época de menor demanda, lo que favorece la disponibilidad de precios más competitivos. Y no solo para los salones y complejos de celebración. En este periodo, muchos proveedores, desde fotógrafos hasta floristas, suelen tener agendas más despejadas, lo que les permite ofrecer tarifas más ajustadas para llenar esos días vacíos.
Otro truco para reducir gastos es optar por fechas poco tradicionales, como los viernes, que suelen ser más económicos en comparación con los sábados, el día favorito de las parejas. Aprovechar estas opciones puede marcar una gran diferencia en el presupuesto total de la boda, sin sacrificar calidad ni detalles.
Consejos para ahorrar en una boda
Los expertos de Bodas.net recomiendan establecer un objetivo claro, realista y alcanzable como primer paso en la planificación de la boda. Esto permitirá a la pareja calcular con precisión cuánto necesitan ahorrar y les ayudará a comprometerse a destinar una cantidad fija cada mes. Para gestionar este ahorro de manera eficiente, también sugieren abrir una cuenta bancaria exclusiva para los gastos de la celebración.
Otro buen método para organizar los gastos de una boda es establecer prioridades claras. Para ello, se pueden crear tres categorías: “Imprescindibles”, que incluye los elementos que no pueden faltar bajo ningún concepto; “Prescindibles”, con aquellos aspectos que se consideran totalmente descartables; y “Probables”, donde se colocan las opciones que se incorporarían si queda margen en el presupuesto.
Otra estrategia útil es aprovechar descuentos y promociones, como las del Black Friday o los outlets. Existen numerosas oportunidades para adquirir productos o servicios a precios más bajos, demostrando que organizar una boda económica es posible con planificación y atención a las oportunidades.
Además, existen diversas formas de reducir costes en una boda sin sacrificar estilo ni calidad. Por ejemplo, en el caso de la decoración floral, se pueden optar por alternativas más económicas como margaritas o paniculatas, flores que ofrecen una apariencia elegante y delicada a un precio mucho más accesible que opciones más tradicionales como las rosas o los lirios.
En cuanto al catering, elegir un menú de boda más asequible, como un buffet, puede ser una excelente opción. Este formato no solo permite mayor flexibilidad para los invitados, sino que también ayuda a ajustar los costos al ofrecer una variedad de platos sin las formalidades de un banquete tradicional. Otra alternativa es sustituir la clásica tarta nupcial por una selección de postres o dulces más sencillos, como cupcakes, tartaletas o mesas de postres personalizados, que además añaden un toque creativo y moderno a la celebración.