Ganar la lotería trae consigo una multitud de cosas positivas, como una mayor despreocupación por los ingresos y los gastos, la posibilidad de invertir el dinero en el negocio que siempre se deseó, saldar deudas pendientes o darse algún capricho que con anterioridad no se podía permitir. Sin embargo, aunque casi todo el mundo sueña con hacerse con un premio grande de uno de estos sorteos, la victoria puede traer consigo algunas desventajas inesperadas.
El dinero y la codicia pueden corromper a la gente. Son muchos los ejemplos de personas que han acabado arruinadas en poco tiempo tras haber ganado la lotería, pues han despilfarrado el dinero en lujos innecesarios o regalos demasiado caros para sus conocidos. Además, también existe la posibilidad de que, una vez se conozca la noticia, el círculo más cercano del ganador quiera llevarse parte del premio o este comience a recibir adulaciones y tratamientos diferentes con el objetivo de conseguir algún favor.
Contar con un buen asesoramiento financiero e incluso ayuda psicológica puede ser necesario en estos casos: tanto para saber gestionar correctamente la gran cantidad de dinero que entra en la cuenta bancaria, como para saber afrontar los nuevos cambios vitales a los que tendrá que enfrentarse el ganador. El objetivo es que el premio dure, que se invierta correctamente y que se aprenda a poner límites, especialmente con personas codiciosas que únicamente se acercan para llevarse parte del premio.
A través del sitio web de Reddit, una mujer anónima de 28 años ha compartido su historia familiar tras ganar más de dos millones de dólares en la lotería. Un golpe de suerte que, además de traerle la posibilidad de vivir más despreocupadamente, le ha generado un conflicto familiar por el egoísmo de sus padres y hermanos.
“Ahora me llaman mocosa ingrata”
“Cuando era niña, siempre fui la ‘oveja negra’. Mis hermanos eran los niños de oro y, aunque no me ignoraron del todo, definitivamente me llevé la peor parte”, explica la joven de Reddit, que proviene de una familia de cinco personas: sus padre, un hermano de 30 años y una de 25. Incluso cuando creció, fue relegada de la vida familiar en algunas ocasiones, como un viaje que realizaron al extranjero y al que no solo no fue invitada, sino del que también se enteró a través de las publicaciones de Instagram de su hermana. “Cuando pregunté por qué no me habían incluido, mi madre me dijo: ‘No creíamos que quisieras venir y, además, tenemos un presupuesto ajustado’. Me dolió, pero lo dejé pasar”.
Un mes después, la mujer decidió comprar un boleto de lotería que, según explica, le “cambió la vida”. Con el premio de más de dos millones de dólares, saldó sus deudas, invirtió parte del premio y reservó algo de dinero para sus caprichos. “No le dije a mi familia de inmediato porque no quería que me trataran de manera diferente”.
Sin embargo, la noticia acabó saliendo a la luz cuando ella se compró un coche nuevo: “ahora están furiosos porque no ofrecí ‘compartir la riqueza’. Mi madre dijo que era egoísta guardarme todo ese dinero para mí cuando ellos están pasando apuros (algo nuevo para mí, dadas las vacaciones). Mi hermana insinuó que yo debería pagar sus préstamos estudiantiles y mi hermano me pidió directamente que le comprara una casa”, escribe la ganadora de la lotería. Pese a no haber sido invitada a aquel viaje familiar, ahora ellos sí consideraban que la joven tenía que compartir el premio porque, según las palabras de su padre, “es dinero familiar”.
“Le expliqué con calma que no estaba obligada a compartir nada solo porque somos parientes, especialmente considerando cómo me habían tratado en el pasado. Mencioné el viaje como un ejemplo de cómo me habían excluido”. Sin embargo, sus palabras no sirvieron y, pese a haber sido excluida, actualmente debe enfrentarse a la hostilidad de sus familiares: “Ahora todos me llaman una mocosa ingrata y dicen que estoy arruinando la dinámica familiar”.
Su historia, publicada en Reddit hace pocos días, ya cuenta con más de 25.000 “votos a favor” y cerca de 6.000 comentarios, la mayoría de ellos apoyando su decisión: “No eres un cajero automático ambulante”, “Te sugiero que los cortes, probablemente seguirán acosándote por dinero. Solo están ahí para usarte”.