El colesterol es un problema de salud que afecta a millones de personas en el mundo. En el caso de España, la Sociedad Española de Cardiología estima que un total de 19,5 millones de personas sufren de esta problemática.
Así pues, médicos y especialistas ponen el foco sobre ella, ya que mantener sus niveles bajo control es esencial para prevenir enfermedades cardiovasculares, otra de las grandes lacras nacionales. Y es que las enfermedades isquémicas del corazón fueron la causa de muerte más frecuente en 2023, con 27.203 personas fallecidas, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Ante esto, mantener unos hábitos de vida saludable y una buena alimentación se presentan como dos requisitos necesarios. Entre los alimentos recomendados para tratar el colesterol, las almendras destacan como una opción natural y efectiva.
Por qué la almendra es buena para el corazón
Las almendras son una fuente rica en nutrientes que benefician la salud cardiovascular. Contienen ácidos grasos monoinsaturados, los mismos que se encuentran en el aceite de oliva, conocidos por su capacidad para disminuir el colesterol LDL sin afectar el colesterol “bueno” (HDL). Además, son ricas en fibra, vitamina E y antioxidantes, componentes clave para reducir la inflamación y prevenir la acumulación de placas en las arterias.
En este sentido, diversas investigaciones han demostrado que el consumo regular de almendras puede tener un impacto significativo en la reducción del colesterol. Un estudio publicado en el Journal of Nutrition reveló que las personas que consumieron aproximadamente 28 gramos de almendras al día experimentaron una reducción del 7% en los niveles de colesterol LDL en solo seis semanas. Otro estudio del British Journal of Nutrition señaló que las almendras también aumentan el colesterol HDL, mejorando la salud cardiovascular general.
Cómo actúan las almendras el organismo
Las almendras benefician la salud cardiovascular por varios motivos fundamentales. Sus ácidos grasos monoinsaturados reducen el colesterol LDL, lo que previene la acumulación de placas en las arterias. La fibra soluble presente en estas semillas ayuda a disminuir la absorción de colesterol en el intestino, promoviendo una mejor salud arterial.
Además, contienen esteroles vegetales, sustancias que bloquean parcialmente la absorción de colesterol en el organismo, favoreciendo niveles más saludables. Por su parte, la vitamina E actúa como un potente antioxidante que protege las células del daño oxidativo, factor clave en la prevención de enfermedades cardiovasculares.
Cómo incorporar las almendras en tu dieta habitual
Para aprovechar los beneficios de las almendras, es importante consumirlas de forma adecuada. La porción diaria recomendada es de 28 gramos, equivalente a un puñado o unas 23 almendras. Es preferible optar por almendras naturales o tostadas sin sal para evitar el exceso de sodio.
Puedes incorporarlas como snack entre comidas, agregarlas a ensaladas, yogures, batidos o incluso utilizarlas como base para preparar leche de almendras. Su versatilidad permite adaptarlas a cualquier dieta, ya sea vegetariana, vegana o convencional.
Por otro lado, aunque las almendras son beneficiosas, una ingesta excesiva podría traer efectos negativos sobre la salud. Por ello, es importante moderar su consumo y combinarlas con una dieta equilibrada y ejercicio regular. De igual forma, antes de realizar cualquier cambio en la dieta, se recomienda consultar a un especialista.