La pizza favorita de Pedro Sánchez: cuánto cuesta y dónde encontrarla

Pedro Sánchez es optimista y se ve de nuevo en Moncloa. Lejos queda ya aquel socialista que un día publicó en Twitter que estaba con sus colegas comiéndose una pizza “cojonuda”. Hace ya trece años de aquel tuit y en la vida de Sánchez ha habido muchos cambios. Ahora le cuesta quitarse su chaqueta de presidente del Gobierno y, si tras el 23-J deja de serlo, será un duro golpe para el autor de Manual de resistencia. Pero siempre tendrá un sitio al que volver a llorar sus penas y a hincharse a pizza, como hemos hecho todos en algún momento de bajón: al Luna Rossa.

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Se trata de un restaurante de 25 años de edad ubicado en el centro de Madrid, en la calle San Bernardo, 24. Es un italiano familiar, dirigido por Anna Carla Zucchini junto a su marido y pizzaiolo, Cristian Ogea. Y gracias al jefe del Ejecutivo se ha hecho muy famoso. En concreto, su pizza Cojonuda, que debe su nombre a Pedro Sánchez. Tras aquel tuit, decidieron bautizar con este nombre a una de sus creaciones. Para quienes quieren degustarla, lleva mozzarella fresca, Gorgonzola DOP, spianata picante calabrés, champiñones ecológicos Portobello. Su precio es de 15 euros.

En realidad, aquel 24 de diciembre en el que Sánchez decidió ir a esta pizzería con sus amigos, la pizza que degustó fue la Diávola. Así lo aclaró el presidente del Gobierno en el pódcast de La Pija y la Quinqui, en el que también habó de sus gustos musicales, el festival al que iría, qué piensa de contar infidelidades o de todos los memes de Perro Sanxe. “Esta pizza la hicieron a partir de mi tweet, pero yo creo que pedí la Diávola”, aseguró el candidato socialista.

Aunque restaurantes italianos podemos encontrar uno en cada esquina, el Luna Rossa presume de ser uno de los más longevos. “Casi treinta años avalan la trayectoriaempresarial de un negocio familiar dedicado a satisfacer al comensal con su auténticacocina italiana y napoletana, repleta de recetas que han ido transmitiéndose degeneración en generación y que mantienen la esencia de su origen”, explica el restaurante en su web.

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Destacan que su pizza tiene una masa esponjosa y horneada en genuino horno de piedra con leña, “el primero construido en Madrid al estilo napolitano”. Y no sólo se come bien, sino que también se puede disfrutar de su bodega de vinos de la bella Italia, “que favorece un viaje gustativo pleno de sabores y coloresdel país vecino”.

Por último, su decoración transporta a los cliente a una calle del antiguo Nápoles. “Ladrillovisto, azulejos salpicados de coloridos motivos y sillería de madera de diferentes modelosnos reciben en este lugar, donde se respira cierto romanticismo cargado de sencillez y honestidad”, concluyen.

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