Isamar Herrera, representante de Panamá, protagonizó uno de los momentos más virales e incómodos de la reciente final de Miss Grand International 2025 en Bangkok. El episodio, ampliamente cubierto por medios internacionales como Daily Mail, expuso la presión y el impacto que pueden tener los errores en certámenes transmitidos en directo.

Durante el anuncio de las finalistas, Herrera, de 31 años, interpretó que su nombre había sido llamado tras escuchar un estallido de aplausos y ovaciones. Avanzó hacia el centro de la pasarela, sonriente y visiblemente emocionada, convencida de haber sido elegida entre las mejores. En ese instante, la celebración en la sala era tal que se dificultaba escuchar nítidamente al presentador.

La confusión se hizo evidente cuando, tras una breve pausa, el presentador aclaró: “Eh, perdón. Anuncié a Miss Grand Paraguay. Hay mucho ruido en esta sala, repleta de fans de todo el mundo”. Quedó claro que la seleccionada era Cecilia Romero, representante de Paraguay, y no la candidata panameña. Las cámaras captaron el momento en el que Herrera, con discreción, regresaba a su sitio, mientras la paraguaya tomaba su lugar entre las finalistas.

El error fue inmediato motivo de repercusión en redes sociales. En la cuenta de Instagram de Herrera, que supera los 21.000 seguidores, se multiplicaron los mensajes de aliento y apoyo. Una seguidora de Paraguay escribió: “Me dio mucha pena lo que pasó. Fuiste una buena candidata, impecable cada vez que saliste, y merecías la clasificación. Estoy segura de que cosas mejores vendrán en tu vida”.

Desde Nicaragua, otro mensaje expresó: “No me gusta burlarme de la desgracia ajena, pero qué triste y humillante debió ser ese momento tan embarazoso para ti. Te mando besos y un gran abrazo desde Jinotega”. Muchos comentarios atribuyeron el error a los nervios propios de un certamen internacional, asegurando que, con el tiempo, este tipo de experiencias pueden verse incluso con algo de humor.

Los seguidores de Herrera insisten en que ella podrá superar rápidamente este episodio vergonzoso. Destacan que su perfil excede los estándares tradicionales de las reinas de belleza: cursa estudios de Publicidad, es empresaria, cantante y domina tres idiomas (español, inglés fluido y hebreo intermedio). Estas cualidades la dotan de una proyección internacional sólida y de la seguridad necesaria para enfrentar desafíos públicos.

Tras el incidente, Herrera declaró ante los medios congregados en Bangkok: “Estas cosas pasan. Fue un error y esto es una competencia”, afirmó la representante de Panamá. También subrayó la importancia de aceptar los resultados y de celebrar el desempeño de quienes sí alcanzaron la clasificación. La madurez y el profesionalismo con que abordó la situación fueron resaltados tanto por la prensa como por los espectadores.

La gala concluyó con la coronación de Emma Tiglao, representante de Filipinas, como Miss Grand International 2025. Cecilia Romero, de Paraguay, ocupó efectivamente un lugar entre las finalistas, mientras que la escena del error quedó grabada como uno de los sucesos más insólitos y compartidos de la edición, según reseñó Daily Mail.

El incidente dejó varias lecciones para la organización y las futuras ediciones del certamen. Resulta evidente la importancia de asegurar una comunicación clara incluso en entornos de alta presión y bullicio. También quedó de manifiesto el peso de la viralidad en redes sociales: una situación embarazosa se transforma rápidamente en tema global.

La resiliencia y entereza de Isamar Herrera se elevaron como ejemplos para quienes aspiran a destacar en escenarios internacionales. Su capacidad para mantener la compostura y demostrar deportividad frente al mundo fue el verdadero triunfo que muchos subrayan, más allá de los resultados del concurso.

La edición 2025 de Miss Grand International no solo será recordada por la victoria de Tiglao, sino también por la actitud y la dignidad con la que Herrera enfrentó un error cuya imagen recorrió el mundo. Daily Mail dedicó espacio al episodio, resaltando la fortaleza y proyección de Herrera más allá del certamen, consolidándola como una figura de admiración y ejemplo para las próximas generaciones de concursantes.