Gigi Hadid: “Tener cámaras todos los días a mi alrededor me produjo una sensación de oscuridad”

"Llegó un momento en mi carrera en el que empezó a haber cámaras todos los días en Nueva York. Y eso me produjo una sensación de oscuridad“, dijo Gigi Hadid con una sinceridad que resuena en su voz.

Sentada cómodamente en su casa en el tranquilo entorno rural de Pensilvania, la supermodelo reveló la razón detrás de su mudanza al campo. Aunque su vida profesional la convirtió en una de las figuras más reconocidas en la moda internacional, Hadid no escatimó en detalles al hablar sobre el precio que paga por la fama: “Tuve un punto en el que tenía tres días libres y me quedaba dentro durante tres días. Y eso es muy intenso”.

La elección de mudarse a una granja reconvertida en las colinas de Pensilvania fue un escape de la vorágine mediática, y un refugio para su hija Khai, que en ese momento comenzaba sus primeros años de vida.

Aunque la naturaleza tranquila de su nuevo hogar enmarca su vida en este momento, Hadid no deja de recordar las tensiones de los primeros años de su carrera, donde “hubo momentos al principio en los que di demasiado”, y la invasión de su privacidad estuvo siempre a la orden del día.

Este espacio rural se convirtió en su santuario personal, y en el lugar donde, por fin, pudo encontrar un equilibrio entre su fama y su vida privada.

La entrevista con Vogue reveló una Gigi más reflexiva, que hoy, a sus 30 años, se muestra dispuesta a afrontar los retos de la maternidad y la industria de la moda con una nueva perspectiva.

“La maternidad me hizo más propia”, comentó, mientras su voz tiembla al recordar cómo, al tener a Khai, aprendió a navegar la fama de una manera completamente distinta.

Para Gigi Hadid, la fama trajo oportunidades, y una presión constante. En la conversación con Vogue, la supermodelo reflexionó sobre el momento en que decidió mudarse a la zona rural de Pensilvania. La necesidad de escapar de las cámaras de Nueva York fue la fuerza impulsora detrás de esta decisión.

“Llegó un momento en mi carrera en el que empezó a haber cámaras todos los días en Nueva York. Y eso me produjo una sensación de oscuridad”, comentó de manera franca. Esta sobreexposición mediática fue suficiente para que Hadid tomara la decisión radical de alejarse del bullicio de la ciudad y mudarse a un entorno más tranquilo y apartado.

La casa de Hadid, ubicada en medio de las colinas de Pensilvania, reflejó su deseo de simplicidad y privacidad. “Este era un lugar para pasar la pandemia, luego un telón de fondo bucólico para los primeros días de la vida de mi hija Khai”, afirmó Hadid, subrayando cómo el entorno natural se convirtió en un refugio tanto para ella como para su hija, quien ahora tiene cuatro años.

Este cambio de vida también se presentó como una respuesta a la invasión que sufría en la gran ciudad, un espacio donde la privacidad se convierte en un lujo cada vez más difícil de encontrar.

A lo largo de su carrera, Gigi Hadid fue una de las figuras más visibles en el mundo de la moda, pero también enfrentó los efectos negativos de esa exposición constante.

En su conversación con Vogue, Hadid no dudó en hablar sobre los momentos difíciles que vivió debido a la invasión de su privacidad y el juicio constante sobre su imagen.

“Sentí que, incluso cuando estaba tratando de ponerme algo informal e ir a tomar un café o ir a la farmacia, para salir, alguien hizo un comentario: ¿Por qué está vestida así? Parece desaliñada. Parece que trabajó demasiado”, reveló, describiendo cómo las críticas sobre su apariencia se convirtieron en una constante en su vida.

Desde los primeros días de su carrera, Hadid tuvo que lidiar con comentarios sobre su cuerpo que a menudo cruzaban la línea entre la crítica constructiva y el acoso.

“Me llamaron de todos los modos posibles. ‘Está demasiado pesada’ o ‘Tiene un trastorno alimentario’, eran las cosas que escuchaba con frecuencia”, dijo con un tono de agotamiento, dejando claro el costo emocional que estos comentarios tuvieron en su vida.

La atención sobre su cuerpo fue uno de los aspectos más dolorosos de su carrera, especialmente cuando era juzgada por algo tan íntimo y personal como su físico.

Sin embargo, Hadid también reconoció que este nivel de atención viene con su trabajo como figura pública, y aprendió a navegarlo de manera más equilibrada. “Esto es parte del trabajo; cuando eres una figura pública, es parte del trabajo”, comentó, mostrando un entendimiento maduro sobre su rol en el ojo público.

Aunque pasó por muchas dificultades, hoy en día se siente más en control y menos vulnerable a las críticas. “Ahora me doy la gracia y miro cuántas cosas manejé. Paso a paso, aprendí. Lo superé”, reflexionó sobre su capacidad para sobrellevar los momentos difíciles que la fama le impuso.

Desde sus primeros días en el mundo del modelaje, Gigi Hadid se destacó por su presencia y singularidad en las pasarelas. Sin embargo, no fue un camino fácil para la supermodelo, quien llegó a la industria en un momento en el que las supermodelos tradicionales dominaban las pasarelas.

“Las Supermodelos se definían por su individualidad, su personalidad, su fuerza y el hecho de que celebraban eso”, dijo Donatella Versace, una de las primeras en apoyar a Hadid. Según la diseñadora, Gigi Hadid tiene un espíritu similar al de las modelos icónicas de los años 90, cuya esencia trascendió más allá de su belleza física para convertirse en un emblema de poder y personalidad.

El comienzo de Hadid en el modelaje estuvo marcado por el rechazo de algunos agentes, pero pronto encontró su lugar en la industria. “Mi carrera empezó a acelerarse después de que conocí a Luiz Mattos en un ascensor”, recordó Hadid, aludiendo al momento crucial en el que un encuentro fortuito con el director de IMG cambió su trayectoria.

“Le dije: ‘Está bien, hablemos de nuestros objetivos para los próximos cinco años’.” Esta actitud proactiva le permitió, encontrar un mentor, asegurándose de que su carrera fuera más que solo una cara bonita en las pasarelas.

A lo largo de los años, Gigi Hadid se convirtió en una de las modelos más demandadas, y su relación con marcas como Versace y su aparición en campañas internacionales cimentaron su lugar en la industria. “Para mí, Gigi tiene ese mismo espíritu de las supermodelos icónicas”, expresó Versace al hablar sobre el estilo único de Hadid, quien rápidamente se convirtió en una de las modelos más importantes de la nueva era de la moda.

Además, Gigi fue una de las pioneras en la era digital, estableciéndose como una de las primeras “modelos de Instagram”, un cambio de paradigma que acercó a las modelos a su audiencia y redefinió el concepto de “estrella de pasarela”.

A pesar de su éxito, Hadid no dejó que la fama la definiera por completo. “Cuando era niña, miraba Forensic Files o Food Network”, dijo, revelando su interés por temas que van más allá de la moda y la belleza. “La escuela de cocina era, y sigue siendo, otra posibilidad: me encanta cocinar.”

En sus primeros años, Hadid también contempló otras posibilidades, como jugar al voleibol en la universidad, pero finalmente optó por la moda, llevando su pasión al siguiente nivel.

A medida que Gigi Hadid se acerca a su 30º cumpleaños, el 23 de abril, su enfoque se desplazó hacia nuevos horizontes, tanto personales como profesionales. A pesar de haber consolidado una exitosa carrera en el modelaje, Hadid no se detiene en el pasado.

“Siento que muchas de las cosas en mi carrera, en mis relaciones, en mi vida, en mis amistades, por las que la gente normalmente pasa a los 30, yo las pasé a los 20”, comentó, subrayando cómo su vida siguió un curso acelerado.

Ahora, su objetivo es hacer más cosas que la desafíen, y “si me siento asustada o intimidada, eso significa que estoy emocionada. Y sí, en este punto, ¿por qué no intentarlo?” Con esta mentalidad, Hadid sigue buscando nuevas experiencias que la lleven a explorar su creatividad y potencial, tanto dentro como fuera de la pasarela.