Denzel Washington asegura que no sería él sin ese disco que le cambió la vida...

Denzel Washington, uno de los actores más emblemáticos de Hollywood, es reconocido por su impresionante carrera, que comenzó en los años 80 con películas como Cry Freedom y Glory.

Su presencia en pantalla, carisma y precisión actoral le otorgaron un estatus de leyenda, habiendo interpretado personajes tan variados como Malcolm X, policías corruptos y hasta un ángel celestial.

A lo largo de las décadas, demostró una versatilidad única, acumulando nueve nominaciones al Oscar, de las cuales dos le valieron la victoria, informó Far Out.

Sin embargo, a pesar de su éxito y estatus, Washington mantuvo una postura bastante reservada en cuanto a sus opiniones sobre otros artistas.

Rara vez elogia a sus colegas y, en sus entrevistas, es conocido por ser directo y, a veces, sarcástico. No busca deslumbrar a los demás con superlativos, una característica que también se refleja en sus gustos personales.

En una entrevista de 2012 con Grantland, Washington fue preguntado acerca de la música que más lo había marcado a lo largo de su vida. Con una respuesta que refleja su estilo habitual, fue breve pero categórico: What’s Going On de Marvin Gaye.

Aunque aclaró que el disco no cambió su vida de manera trascendental, sí rememoró vívidamente el impacto visual de la portada, donde Gaye aparece con su chaqueta Nehru y el cuello levantado bajo la lluvia. Para Washington, esa imagen, combinada con la música, dejó una huella que perduró en su memoria.

Lanzado en 1971, What’s Going On se convirtió en uno de los discos más innovadores y revolucionarios de la música popular. Marvin Gaye, una de las estrellas más grandes de Motown, rompió con el sonido característico del sello y presentó un álbum lleno de complejidad emocional, lírica profunda y un enfoque social y político que, en su momento, fue considerado arriesgado.

Mientras que el resto de la industria se mantenía en sus fórmulas comerciales, Gaye optó por una obra que desbordaba sentimientos, mezclando un tono melancólico con una crítica a las injusticias sociales y políticas.

Los Estados Unidos estaban sumidos en una época de agitación política, con las protestas por los derechos civiles y la oposición a la guerra de Vietnam, lo que llevó a Gaye a alejarse de sus canciones de amor típicas para abordar temas más oscuros y complejos. El disco reflexionaba sobre la política, y también sobre la humanidad, algo que resonó profundamente con la juventud de su tiempo.

El proceso creativo de What’s Going On estuvo influenciado tanto por los eventos sociales como por las vivencias personales de Gaye. En ese momento, la violencia contra los manifestantes en los EE.UU., así como los recuerdos de las cartas que su hermano le enviaba desde Vietnam, lo impulsaron a hacer una declaración en su música.

Gaye también estaba atravesando un dolor personal por la muerte de su amiga y colaboradora Tammi Terrell, lo que aportó una capa emocional que definió la atmósfera del álbum.

La decisión de Gaye de abandonar el estilo tradicional de Motown y crear un sonido más introspectivo y profundo, además de su enfoque en cuestiones como la pobreza, la guerra y la opresión racial, marcó un antes y un después en la música de la época.

Aunque el álbum fue una desviación radical respecto a su trabajo anterior, What’s Going On fue un éxito inmediato. Su mensaje resonó tanto en el público afroamericano como en otras audiencias, y el álbum se convirtió en la banda sonora de una generación que vivió la lucha por los derechos civiles y las protestas contra la guerra. Hoy, más de cinco décadas después, sigue siendo considerado por muchos como uno de los mejores discos jamás grabados.

“El álbum se convirtió en la banda sonora de una generación que vivió la lucha por los derechos civiles.” La crítica social y la profundidad emocional del álbum siguen siendo relevantes, y artistas de diversas generaciones citaron What’s Going On como una fuente de inspiración.

Con el paso del tiempo, Marvin Gaye logró mantenerse como una de las figuras más influyentes de la música, mientras que su álbum sigue siendo un referente clave para quienes buscan comprender las complejidades sociales y políticas a través del arte.

Para Denzel Washington, What’s Going On representa algo más que un simple álbum. La conexión emocional que tuvo con el disco a lo largo de los años refleja su aprecio por las obras que son innovadoras, planteando preguntas difíciles y relevantes sobre la sociedad.

Aunque Washington no se considera un músico ni un experto en música, la manera en que What’s Going On lo impactó demuestra cómo las grandes obras pueden trascender géneros y generaciones, dejando una huella imborrable en aquellos que las escuchan y las viven.

Marvin Gaye, con su mirada profunda sobre el “qué está pasando” en el mundo, logró capturar la esencia de su tiempo de una forma que sigue teniendo eco en la actualidad.

Para Washington, este álbum sigue siendo un recordatorio poderoso de la capacidad de la música para transformar y provocar reflexión, algo que sigue vigente en un mundo que, a veces, parece no haber cambiado tanto.