Conan O’Brien y los secretos de la 97ª edición de los Oscar

Conan O’Brien hizo su debut como presentador de los Premios Oscar en 2025, en la 97ª edición de la ceremonia. El reconocido comediante y presentador, conocido por su aguda ironía y su estilo único, asumió por primera vez el desafío de conducir uno de los eventos más importantes de la industria del cine.

Tras una velada llena de momentos inolvidables, O’Brien compartió detalles desconocidos de su experiencia tras bambalinas durante un episodio especial de su podcast Conan O’Brien Needs a Friend.

En este podcast, O’Brien no solo desveló los desafíos y la complejidad de preparar un show de tal magnitud, sino que también abrió una ventana a su vida personal, compartiendo anécdotas inéditas sobre tragedias familiares, interacciones con grandes figuras del entretenimiento y hasta las estrictas reglas de la Academia.

A lo largo del podcast, O’Brien destacó la rigurosidad con la que la Academia cuida ciertos aspectos del espectáculo, especialmente en lo relacionado con la imagen del premio Oscar.

Uno de los detalles más sorprendentes fue el incidente con la famosa estatuilla dorada, cuando O’Brien sugirió en tono humorístico que el Oscar podría ser colocado en un sofá gigante mientras él lo aspiraba con una aspiradora. “Oscar nunca puede estar en posición horizontal”, le informaron los responsables de la Academia, dejándolo perplejo.

También se enteró de una regla estricta que prohibía colocar cualquier tipo de prenda en la estatua, la cual siempre debe mantenerse “desnuda”.

Conan O’Brien compartió una anécdota sobre uno de los momentos más inesperados de la noche: su encuentro con Mick Jagger, quien hizo una aparición sorpresa para presentar el premio a la mejor canción original.

O’Brien recordó cómo, mientras estaba concentrado en los monitores antes de su presentación, notó una presencia a su lado y se dio cuenta de que era Jagger. “Lo miré y comenzó a darme empujoncitos y alentarme”, relató O’Brien, quien añadió que Jagger le preguntó y comentó que “¿Cómo está el público? Siempre me preocupan".

La estrella de rock también le comentó a O’Brien que “siempre llevo un auricular y escucho al público, y a veces me doy cuenta de que aún no está del todo preparado, y tengo que esforzarme un poco más desde el principio”.

A pesar de la sorpresa y el alivio que le causó ver que incluso una leyenda como Jagger se preocupaba por la audiencia, O’Brien destacó que “Mick Jagger está 35 niveles por encima de mí. Aunque compartiera una preocupación similar, Jagger sigue siendo una figura que pertenece a otro nivel".

O’Brien compartió una de las ideas originales para el inicio de los Oscar, en la que él habría interpretado un número inspirado en Wicked, pintándose completamente de verde. “Empieza conmigo y estoy en Wicked y todo verde, terminando Defying Gravity o una de esas canciones", explicó.

La idea continuaba con parodias de otras películas como Gladiator II y Dune 2, en las que se habría mostrado a O’Brien como un gladiador, pero con el tinte verde aún visible.

Sin embargo, según palabras del comediante: “Todo el problema es que el tinte no salía”. Debido a la complejidad y los múltiples montajes requeridos, la idea fue descartada. Los directivos de la Academia optaron finalmente por abrir la ceremonia con un tributo musical a Los Ángeles, presentado por las estrellas de Wicked, Ariana Grande y Cynthia Erivo.

O’Brien reveló que la invitación para ser presentador de los Oscar llegó de manera completamente inesperada, justo al regresar de un viaje a España a finales de noviembre del año pasado. “No estaba en nuestro radar... fue como si hubiera recibido una llamada que dijera: ‘Queremos que seas la nueva Miss América’. Fue así de aleatorio y inesperado”, describió el comediante de 61 años. A pesar de la sorpresa, aceptó el reto, asegurándose de contar con el apoyo de su compañero de siempre, Mike Sweeney.

El relato de O’Brien no estuvo exento de momentos personales dolorosos. En su narración, describió cómo, justo después de aceptar el trabajo como presentador de los Oscar, recibió la noticia de que su padre había fallecido mientras estaba en Austria. Un regreso inesperado a casa, entre tragedias familiares, terminó siendo una experiencia extremadamente emocional para O’Brien.

“Mientras estaba en casa, vi que mi madre también se iba, y se fue tres días después. Esa fue una experiencia muy intensa”, compartió O’Brien durante su podcast, detallando la secuencia de tragedias personales que lo golpearon justo antes del evento.

El comediante también recordó cómo poco después de ese devastador período, se vio obligado a evacuar su casa en Pacific Palisades debido a los incendios forestales que afectaron Los Ángeles.