En el suroeste de Inglaterra, un ambicioso proyecto de reforestación está empleando tecnología avanzada para acelerar la restauración de los bosques tropicales templados. A través del uso de drones especializados, la organización Woodland Trust dispersó 75.000 semillas en el paisaje de Bodmin, en Cornualles, con el objetivo de triplicar la extensión de estos ecosistemas en la región para 2050.
Esta iniciativa, desarrollada en conjunto con la South West Rainforest Alliance, busca revertir la pérdida de cobertura forestal en Devon y Cornualles, donde en el pasado el 75% del territorio estaba cubierto por selvas, pero el 90% de esa superficie fue deforestada, según Positive News.
El valor de los bosques tropicales templados
Estos ecosistemas, tal y como explicó Positive News, se encuentran entre los más amenazados del planeta y albergan una biodiversidad excepcional. Sam Manning, responsable del proyecto de selvas tropicales del Woodland Trust, aseguró que estos bosques son “hotspots de biodiversidad” y refugio de más de 2.000 especies de líquenes.
Además, subrayó que su restauración resulta fundamental para abordar la crisis climática y de biodiversidad, dado que estos ecosistemas solo cubren el 1% de la superficie terrestre y el Reino Unido es una de las pocas naciones que aún los conserva.
Drones al servicio de la reforestación
El despliegue de drones facilita la reforestación en áreas de difícil acceso y permite una dispersión de semillas más eficiente. Según Positive News, cada dispositivo pesa 110 kg y puede transportar hasta 58 kg de semillas en cada vuelo.
Además, en solo ocho horas lograron sembrar 11 hectáreas de especies nativas como roble común, aliso, cerezo silvestre, abedul pubescente y avellano.
Manning detalló que la velocidad y el alcance de los drones representan una ventaja significativa en comparación con la plantación manual, la cual requiere más tiempo y recursos. También afirmó que esta tecnología ofrece una solución viable para restaurar grandes extensiones de bosque sin los costos operativos asociados a los métodos tradicionales.
Los desafíos de la reforestación con drones
A pesar de sus beneficios, la efectividad de la siembra con drones está condicionada por factores ambientales. Positive News informó que las tasas de supervivencia de las semillas pueden verse afectadas por las condiciones del suelo, la depredación por animales y la climatología. Para evaluar estos aspectos, el proyecto estableció zonas de control que permitirán comparar la regeneración natural con la siembra asistida por drones.
Manning aseguró que se espera lograr una tasa de éxito del 25% en la germinación de las semillas. De alcanzarse este objetivo, afirmó que se podría incentivar a más organizaciones y financiadores a invertir en la optimización de esta técnica.
Otro desafío identificado por Positive News es la disponibilidad de semillas en cantidades suficientes para cubrir grandes extensiones de tierra. Además, la regulación sobre el uso de drones en proyectos ecológicos sigue evolucionando, lo que limita el número de empresas con permisos para operar estos dispositivos en reforestación.
Una mirada histórica: el pasado forestal del Reino Unido
El Reino Unido albergó en el pasado extensas selvas tropicales templadas. Según Positive News, hasta un 20% de las Islas Británicas estuvo cubierto por estos ecosistemas, pero la expansión de la agricultura y la urbanización redujeron esta superficie a menos del 1% actual.
Merlin Hanbury-Tenison, autor de Our Oaken Bones y propietario de tierras donde se realizó la siembra, sostuvo que el uso de nuevas tecnologías es clave para revertir la pérdida de estos ecosistemas. “Si queremos recuperar estos hábitats, debemos utilizar soluciones tecnológicas innovadoras”, afirmó.
El futuro de la reforestación con drones
El proyecto cuenta con el respaldo del Rainforest Recovery Project del Woodland Trust y del Species Survival Fund de Defra, lo que permite financiar la iniciativa y evaluar sus resultados en los próximos tres años.
Si la técnica demuestra su efectividad, Positive News aseguró que podría representar un punto de inflexión en la restauración de bosques a gran escala, ayudando a recuperar la biodiversidad perdida y fortaleciendo la capacidad de adaptación de los ecosistemas al cambio climático.
