‘MasterChef Celebrity’: un revolcón en los recuerdos de los famosos fue la inspiración para preparar platos que evocaron sus raíces

Luego del reto de eliminación, los jurados determinaron que Martín Karpan debía abandonar la competencia por un error que nadie esperaba, ni siquiera él mismo: su risotto tenía un marañón quemado y así se lo hizo saber Chris Carpentier.

Ahora, con un participante menos en juego, los demás famosos fueron puestos a prueba en un difícil reto: tener que recordar la emotividad de su infancia a través de fotos que fueron reunidas. Casi todos lloraron, desde Jair hasta Carlos; incluso Carolina Gómez estalló en llanto contra su voluntad, diciendo, “Me cuesta mucho llorar en público, no me gusta verme frágil”.

Posteriormente, con base en esos recuerdos y fotos desempolvadas, debieron preparar platos que reflejaran sus raíces, así como sus emociones, temores y, en resumen, lo mejor de sí mismos. Adicionalmente, Jorge Rausch advirtió que la idea era preparar un plato con “buena técnica, pero cocinar con el corazón”. Así las cosas, los famosos tuvieron 60 minutos para hacer una buena preparación.

Unos acudieron al pollo, mientras que otros, como Chicho, se inspiraron en la carne para ensamblar sus platos. Por su parte, Natalia decidió hacer una preparación con atún crudo, dejando como resultado un tartar rojo, con motivo de la rabia que le recordaba a épocas más juveniles. Ese fue el primero de los cinco platos que escogieron los jurados para evaluar.

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El segundo en pasar al frente fue Carlos, que se paró frente al exigente jurado con un corte de carne en una cama de espárragos, trayendo al presente su infancia, cuando comía frecuentemente churrasco con papas. Si bien los chefs destacaron su plato (incluso Nicolás de Zubiría dijo que “hasta ahora es su mejor plato de la competencia”), todos coincidieron en que los chips de plátano quedaron muy gruesos.

Uno de los platos más esperados era el de Tatán Mejía, y justamente Nicolás lo llamó para pasar al frente. La presentación había llamado la atención y, de paso generó expectativa entre sus compañeros: unos chicarrones envueltos en una cubierta de aguacate y bañados con una salsa con reducción de vinagre. Pero los chefs se llevaron una gran sorpresa y, una vez probaron bocado, no dijeron una sola palabra.

Luego llegó el turno de Ramiro, que aclaró el turbio panorama con un arroz llamado ‘Mariposas en el estómago’, una especie de paella con pescado y pollo. A pesar del buen sabor, Rausch reprochó la falta de sal. Y para terminar de alegrar la cocina, Isabella Santiago se presentó con una arepa reina pepiada, típica de su natal Venezuela. Pese a la sencillez de su plato, los jurados quedaron enamorados con el plato típico.

Jorge Rausch como Nicolás coincidieron en que fue una “tremenda arepa”, y Chris Carpentier padeció al no poder comérsela con cubiertos, intentando morder una parte donde sus colegas no hubieran tenido contacto. Finalmente, el chileno estuvo de acuerdo con los otros dos con respecto al veredicto.

Favoreciendo todas las expectativas, Isabella ganó el pin de inmunidad y la posibilidad de salvar a alguien de participar en el reto creativo, el cual consistió en preparar postres: toda una prueba de fuego para muchos.

La actriz y modelo decidió salvar a Lady Noriega, y de paso, escogió las parejas para la prueba: Aida Bossa y Aida Morales conformaron un equipo, en tanto que Tostao quedó junto a Corozo. Tatán y Pamela trabajaron juntos por primera vez. Carolina y Manuela, Jair y Aco Pérez y Carlos y María T conformaron los dúos restantes.

Los postres debían tener la condición de incluir unas galletas que, por su sabor, eran las ideales para el grupo; sin embargo, los comentarios de los chefs, que se verán completos en la noche del jueves, no dejaron muy contentos a muchos.

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