Qué es el Despertar de Osiris, el ritual con el que Tutankamón esperaba volver a la vida

El arqueólogo Nicholas Brown demostró que simples objetos escondían un poderoso rito de resurrección en el Antiguo Egipto

Guardar
El arqueólogo Nicholas Brown revela
El arqueólogo Nicholas Brown revela un ritual de resurrección en la tumba de Tutankamón (Créditos: AP 163)

Un conjunto de objetos hallados en la tumba de Tutankamón, el célebre faraón de la Dinastía XVIII del Antiguo Egipto, reveló un ritual funerario que podría cambiar la comprensión de las prácticas religiosas de la época. Según informó La Vanguardia, el arqueólogo Nicholas Brown, de la Universidad de Yale, identificó en estos artefactos la evidencia más antigua del “Despertar de Osiris”, un rito diseñado para garantizar la inmortalidad del monarca en el más allá. Este descubrimiento sugiere que el joven faraón, fallecido hace más de 3.300 años, fue pionero en la implementación de este rito.

El hallazgo se centra en unas bandejas de arcilla y bastones de madera dorados, conocidos como emblemas pedj-aha, que habían pasado desapercibidos durante décadas. Estos objetos, colocados cerca del sarcófago de Tutankamón, fueron inicialmente considerados decorativos. Sin embargo, el análisis de Brown, publicado en la revista The Journal of Egyptian Archaeology, los vincula directamente con rituales de degustación y regeneración asociados al dios Osiris, figura central de la mitología egipcia y señor del inframundo.

Un descubrimiento que desafía las interpretaciones previas

La tumba de Tutankamón, descubierta en 1922 por Howard Carter, es conocida por su abundancia de artefactos -más de 5.000-, incluida la famosa máscara dorada. Sin embargo, según La Vanguardia, recientemente se ha comenzado a prestar atención a las bandejas de arcilla y bastones de madera, que estaban a 1,5 metros de la cabeza del sarcófago y habían pasado desapercibidos hasta ahora.

El estudio de Brown indica que las bandejas de barro del río Nilo, colocadas sobre esteras de junco en la tumba del faraón, estaban destinadas a contener agua con simbolismo de fertilidad y regeneración vinculada a Osiris. Este agua era usada en rituales para “revivir” al faraón en el más allá. Los bastones dorados, ubicados tras la cabeza del monarca, también desempeñaban un papel esencial en estos rituales según antiguos textos egipcios.

La tumba de Tutankamón, descubierta
La tumba de Tutankamón, descubierta en 1922 por Howard Carter (Créditos: Biblioteca Nacional de España)

El ‘Despertar de Osiris’: un rito de inmortalidad

El “Despertar de Osiris” es un ritual funerario que buscaba transformar al difunto en una encarnación del dios del inframundo, asegurando su inmortalidad en el reino espiritual. Según informó La Vanguardia, el mito de Osiris narra cómo este dios fue asesinado y despedazado por su hermano Seth, siendo posteriormente resucitado por su esposa y hermana Isis.

Este relato, profundamente arraigado en la cosmovisión egipcia, simboliza la regeneración y la vida eterna. Según el estudio, el ritual hallado en la tumba de Tutankamón refleja un intento deliberado de conectar al faraón con esta narrativa divina.

El contexto religioso de la época: un retorno a las tradiciones

El reinado de Tutankamón estuvo marcado por un esfuerzo por restaurar las tradiciones religiosas después del periodo de reformas monoteístas impulsadas por su padre, Akenatón. Este último había centrado el culto en Atón, el disco solar, eliminando las prácticas asociadas a Osiris y otros dioses del panteón egipcio. Según explicó La Vanguardia, el joven faraón y sus consejeros aprovecharon su reinado para reintroducir las creencias tradicionales, incluyendo los ritos funerarios que aseguraban la resurrección en el más allá.

El estudio de Brown destaca que incluso la momificación de Tutankamón refleja esta intención. Los embalsamadores se esforzaron por momificar su pene en posición erecta, un detalle que, según investigaciones previas, simboliza el poder regenerativo de Osiris. Este detalle refuerza la idea de que el faraón fue presentado como una encarnación del dios, consolidando su lugar en el ciclo eterno de muerte y renacimiento.

Créditos: Biblioteca Nacional de España
Créditos: Biblioteca Nacional de España

Un legado que sigue desvelando secretos

A pesar de su breve reinado, que duró apenas una década, Tutankamón dejó un legado que continúa fascinando a arqueólogos e historiadores. Según reportó La Vanguardia, el descubrimiento del “Despertar de Osiris” en su tumba no solo amplía el conocimiento sobre las prácticas funerarias del Antiguo Egipto, sino que también subraya la importancia de este joven monarca en la restauración de las tradiciones religiosas.

El análisis de los objetos hallados en la tumba de Tutankamón demuestra que incluso los artefactos más simples pueden contener claves fundamentales para entender la historia. Este descubrimiento, más de un siglo después de la apertura de su tumba, reafirma el lugar del faraón en la historia como un innovador y defensor de las creencias que definieron la civilización egipcia.