Un video publicado en TikTok por la usuaria española @cristinaapriegoo generó un intenso debate en las redes sociales, acumulando más de 3,8 millones de reproducciones y 262.700 “me gusta” en pocas horas. Grabado en el municipio de Aznalcóllar, en la provincia de Sevilla, España, se observa a Cristina enfrentándose a un salto de cuerda elástica desde una altura considerable.
Sin embargo, lo que captó la atención de los usuarios no es solo la actividad en sí, sino la reacción de la protagonista, quien no dejó de gritar en ningún momento, incluso después de ser empujada por el instructor a pesar de su negativa.
Una experiencia extrema en el corazón de Andalucía
Este lugar, conocido por su entorno natural, es también escenario de actividades de aventura como el salto de cuerda elástica, una práctica que combina adrenalina y vértigo. En esta actividad, la persona se lanza desde una altura elevada con una cuerda elástica atada al torso o al tobillo, mientras el otro extremo permanece fijo al punto de partida.
La cuerda se estira para contrarrestar la aceleración de la caída, generando un movimiento de ascenso y descenso hasta que la energía inicial se disipa.
En el video, Cristina aparece visiblemente nerviosa y gritando de manera constante, lo que llevó a que ella misma describiera la experiencia en su publicación como merecedora del “premio de gritos del año”.
Sin embargo, lo que generó controversia es el momento en que el instructor decide empujarla, a pesar de que ella parecía expresar dudas sobre realizar el salto.
Reacciones divididas en las redes sociales
El video provocó una avalancha de comentarios en TikTok, donde los usuarios expresaron opiniones encontradas sobre lo ocurrido. Algunos dijeron que el instructor no debió empujar a Cristina si ella no estaba completamente segura de querer saltar.
“Si dice que no, no deberían tirarla, y si le pasa algo, ¿quién se hace responsable?”, comentó un usuario. Otro añadió: “Si la persona dice que no tres veces, debería ser retirada inmediatamente y no se le devuelve el dinero. Pero empujarla cuando dice que no, tampoco está bien”.
Por otro lado, algunos usuarios defendieron la acción del instructor, argumentando que en este tipo de actividades es común que las personas duden en el último momento, pero que finalmente disfrutan de la experiencia. “Lo que goza ese hombre cada vez que empuja a alguien”, escribió un usuario en tono divertido.
A pesar de la controversia, Cristina parece haber tomado la experiencia con humor, como lo demuestra el título de su publicación en TikTok.