Año Nuevo Chino 2025: cuándo empieza, qué animal lo representa y qué se celebra

El Año Nuevo Chino, también conocido como el Festival de la Primavera, es la festividad más importante en la cultura china y se celebra con entusiasmo tanto en China como en comunidades chinas de todo el mundo.

Este evento marca el inicio de un nuevo ciclo según el calendario lunar y está cargado de tradiciones, rituales y simbolismos que buscan atraer la buena fortuna, la prosperidad y la paz.

Aunque su fecha varía cada año en relación con el calendario gregoriano, siempre se rige por los ciclos lunares, lo que lo convierte en una celebración única y profundamente arraigada en la historia y la espiritualidad del pueblo chino.

El Año Nuevo Chino tiene sus raíces en antiguas ceremonias en las que se rendían sacrificios a las deidades y a los ancestros con el propósito de pedir paz y abundancia en las cosechas.

Estas celebraciones se remontan a miles de años, y durante la dinastía Tang (618-907 d.C.), se consolidaron y expandieron a lo largo de todo el país. La festividad se convirtió en un momento de unión familiar, renovación espiritual y limpieza simbólica.

Durante el Festival de la Primavera, las familias realizan una limpieza profunda de sus hogares con el objetivo de eliminar cualquier mala suerte acumulada durante el año anterior y preparar el espacio para la llegada de la buena fortuna.

Asimismo, las casas se decoran con adornos de color rojo, considerado un color protector y auspicioso, como faroles, carteles con mensajes de buenos deseos y figuras del animal que corresponde al año.

Otro elemento central es la reunión familiar en una gran cena la víspera del Año Nuevo, donde se comparten platos tradicionales cargados de simbolismo, como el pescado (representación de abundancia) y los dumplings (que asemejan pequeñas monedas).

Durante los días de celebración, es común asistir a desfiles y espectáculos pirotécnicos, ya que se cree que los fuegos artificiales ahuyentan a los malos espíritus. Además, una de las tradiciones más queridas es la entrega de sobres rojos con dinero (llamados hongbao) a los niños, como símbolo de prosperidad y buenos augurios para el nuevo año.

En 2025, el Año Nuevo Chino comenzará el miércoles 29 de enero. A diferencia del calendario gregoriano, que es puramente solar, el chino se rige por ciclos lunares. El Año Nuevo Chino se celebra en la fecha de la segunda luna nueva después del solsticio de invierno boreal, lo que hace que su fecha sea móvil y cambie cada año.

El calendario chino tiene una complejidad especial, ya que cada mes comienza con una luna nueva y su duración varía entre 29 y 30 días dependiendo de la lunación.

Además, su estructura combina aspectos solares y lunares, lo que requiere la adición de un mes extra en algunos años para mantener la sincronización con las estaciones. Este sistema único refleja una cosmovisión armoniosa entre el cielo, la tierra y los ciclos naturales.

El zodíaco chino es una parte fundamental de la cultura y la astrología china. Este sistema se compone de 12 animales: rata, buey, tigre, conejo, dragón, serpiente, caballo, cabra, mono, gallo, perro y cerdo. Cada uno de ellos representa un año en un ciclo de 12 años.

La elección y el orden de los animales están basados en una leyenda tradicional, según la cual el Emperador de Jade organizó una carrera para determinar cuáles serían sus guardianes celestiales. En esta competencia, la rata se alzó con la victoria gracias a su astucia, mientras que el resto de los animales ocuparon sus posiciones según su llegada.

En el calendario chino, cada año no solo está representado por un animal, sino que también se combina con uno de los cinco elementos celestes: madera, fuego, tierra, metal y agua. Estos elementos se combinan con los animales en ciclos de 60 años, lo que otorga características únicas a cada año.

En 2025, se celebrará el Año de la Serpiente de Madera. La serpiente, según la astrología china, simboliza sabiduría, regeneración, introspección y determinación. Por su parte, el elemento madera añade cualidades como crecimiento, flexibilidad, vitalidad y conexión con la naturaleza.

Esta combinación hace que 2025 sea visto como un año propicio para la reflexión personal, la superación de desafíos y el florecimiento en distintos aspectos de la vida.