Guardar
Grego Rosello habló de su relación con Chachu Bonelli

El anuncio resonó en redes sociales, en programas de televisión, en las sobremesas de quienes se detienen frente al mundo del espectáculo nacional: en julio pasado, Chechu Bonelli y Darío Cvitanich confirmaron el final de su matrimonio tras años de relación y dos hijas en común. Ni los más atentos pudieron evitar la sorpresa ante la noticia. Sin embargo, hacía tiempo que los rumores de crisis y distanciamiento rodeaban a la pareja, pero ambos, en un mismo gesto de madurez, aclararon públicamente su prioridad: el bienestar y la armonía de sus hijas.

Mientras la lupa mediática acompañaba el dolor y la transición, Cvitanich encontró un brote de novedad en su vida sentimental y no dudó en compartirlo. En poco tiempo, se mostró a la vista de todos junto a Ivana Figueiras, lo que dejó en claro que su página amorosa ya había dado la vuelta. Su decisión fue tan natural como visible: ambos expusieron la relación casi al mismo tiempo en redes.

La otra cara del relato, la de Bonelli, eligió el resguardo. Mantuvo un perfil discreto, cuidadoso, lejos de los flashes y del ruido. Pero, ¿cuánto tiempo puede una figura resistir la inercia de los rumores? Bastó que se deslizara la palabra “romance” junto a un nombre inesperado para que la maquinaria volviera a girar. En las últimas horas, estalló en las redes y en la televisión: Chechu Bonelli fue vinculada sentimentalmente con el conductor y humorista Grego Rosselló.

Pochi contó detalles de las versiones de romance que involucrarían a Chechu Bonelli y Grego Roselló (Puro Show – El Trece)

El dato se emitió en Puro Show (El Trece), que puso el foco en la vida nocturna y aquellos gestos que la mostraban en compañía de Grego. La chispa la encendió Marcia Frisciotti, conocida como Pochi de Gossipeame, quien aseguró tener pruebas de un reciente cruce entre ambos en un conocido boliche de la Costanera. “Yo consulté si había pasado algo y me dijeron que ‘no’. Muchas ganas, pero no…”, sostuvo Pochi, al abrir un largo compás de especulación. Nada confirmado, pero tampoco negado con firmeza.

La presión aumentó. El programa no tardó en buscar la voz de uno de los protagonistas. El humorista respondió, sin rodeos: “Yo con Pochi tengo buena onda. Me preguntó y obvio que le contesté que me la crucé en una fiesta y charlamos. Yo laburé en ESPN mucho tiempo, desde ahí que nos conocemos, somos amigos. Me parece una genia, una diosa, obvio, pero nada más que eso“.

El periodista, insistente, fue por más, pero la respuesta siguió en el mismo carril: “Solo eso, solo amigos. Está con el tema de su divorcio, se está ocupando de ella, de sus hijas, es una madraza. La verdad que cada vez que hablo con ella está en alguna situación maternal, por decir de una manera, está ocupándose de eso. Sí, también está empezando a vivir, que creo que está bueno y cada tanto me la cruzo y nos divertimos”. Y para que no queden dudas de sus palabras, Grego comprometió en público: “Si algún día pasa algo, te lo cuento, te escribo contento, lo tuiteto. Si es una diosa".

El posteo en broma de
El posteo en broma de Roselló en septiembre pasado (X)

El diálogo se volvía menos formal, más humano, y Grego retomó la idea: “Hay onda, hay risas, hay imágenes que pueden invitar a la fantasía, pero no, nada más. Sí, es una bomba, obvio”, soltó el humorista, entre la broma y la admiración. ¿Sabés qué tiene? Es muy divertida. Me daba fiaca que esto capaz le arme algún tipo de quilombo porque no se lo merece", explicó sobre lo sensible delos rumores tras una reciente separación. “Hablé, nos reímos, obvio, nos divertimos con lo que pasó. No tengo mucho más, la verdad”.

El tema familiar sobrevolaba cada respuesta. ¿Estaría dispuesto Grego a salir con una madre de familia? Su postura fue tajante: “Sí, obvio. Ya me ha pasado de más chico... Me gustan mucho los chicos a mí. Ah, se postulaba como papá luchón”, bromeó.

Chechu Bonelli y Darío Cvitanich
Chechu Bonelli y Darío Cvitanich emn una vieja postal familiar

Sin ánimos de cerrar ninguna puerta, pero sí resguardando lo real, Grego se tomó un segundo y, con una mezcla de honestidad y picardía, concluyó la charla: “Me parece que si tenía alguna chance, me restó. No, obvio que en algún momento me encantaría. Siento que ella no está ahora para eso”.

Así, entre palabras que no confirman ni niegan, que oscilan entre la admiración y el respeto por el momento personal, la presunta relación entre Chechu Bonelli y Grego Rosselló suma capas de suspenso. La exposición, la risa, la buena onda y la empatía parecen calmar, al menos por ahora, el juego del rumor. ¿Hasta cuándo?