
El murmullo empezó en los pasillos del Aeropuerto de Ezeiza este jueves, cuando una figura familiar, envuelta en una gorra, campera de cuero negra y una remera blanca sin logos, cruzó por la zona de partidas internacionales. A su lado, un hombre de paso seguro, vestido de total black, salvo por el calzado, intentaba pasar inadvertido. Pero el anonimato les duró lo que tarda una notificación en llegar a un teléfono: la actriz Eugenia China Suárez y el futbolista Mauro Icardi estaban a punto de dejar el país.
No estaban solos. Entre las valijas y los susurros, se los vio acompañados por el peluquero Juanma Cativa, íntimo de la actriz y habitué de sus viajes, y Marisol Gutiérrez, maquilladora personal y confidente en más de un set. Cargaban bultos grandes, mochilas acolchadas, valijas de colores con ruedas que chillaban contra el suelo encerado del aeropuerto. No parecía un paseo exprés.
Apenas las imágenes rápidamente comenzaron a circular, las redes sociales estallaron. Las versiones más optimistas hablaban de una escapada romántica con la intención de aprovechar el fin de semana largo. Pero la presencia de tantos equipajes sugería otra cosa. ¿Mudanza? ¿Trabajo? ¿Vacaciones largas?

La pregunta quedó sin respuesta. Porque, como en otros capítulos de esta historia de idas, vueltas y posteos enigmáticos, ni Icardi ni Suárez ofrecieron una explicación oficial y el silencio volvió a apoderarse de la historia. Sin embargo, ella no dudó en sacarse fotos con cada una de las personas que se lo solicitaban. Mauro, en tanto compartió solo una postal en penumbras.
En una historia de Instagram compartida por el jugador del Galatasaray —y replicada por ella—, se ve a la actriz sentada en el asiento del avión, medio oculta, con el rostro ladeado y cubierto por gafas. La acompaña un mensaje escueto: “Qué suerte la mía”. La frase parece salida de un diario íntimo, pero no aclara nada. Solo alimenta el misterio.
¿Río de Janeiro o Miami? La cidade maravilhosa y la capital de la Florida eran los destinos que aventuraban sus seguidores. El concierto gratuito de Lady Gaga en la playa de Copacabana, previsto para el fin de semana, sostenía las versiones del itinerario brasileño. La cita musical convocará a más de un millón de personas y es, sin dudas, una excusa perfecta para una pareja que evita los flashes pero no los shows multitudinarios.

Sin embargo, otras versiones más firmes sostenían que el vuelo seguía hacia Miami, una ciudad con la que ambos tienen vínculos afectivos y laborales. De hecho, la actriz compartió allí varias campañas publicitarias y el delantero declaró sentirse cómodo en esa ciudad.
El silencio como estrategia. En el entorno de ambos reinó durante mucho tiempo el mutismo. Nada se confirma, nada se desmiente. Juanma y Marisol, testigos silenciosos del viaje, tampoco dieron demasiadas pistas. No hubo fotos grupales ni geolocalizaciones. Solo esa imagen a media luz, casi un retrato impresionista, que revela lo justo.
Hasta que el futbolista terminó con el misterio con una foto situada en Miami con una panorámica de la costa. Las palmeras, el mar, el horizonte acuarelado y la tranquilidad de unos días a salvo de la polémica. Al menos por ahora.
Así, la relación entre China Suárez y Mauro Icardi suma un nuevo capítulo en medio de fuertes rumores de todo tipo. Desde aquel escándalo mediático con Wanda Nara, que sacudió la escena del espectáculo, la actriz fue señalada como el “tercer vértice” de un triángulo imposible. Desde entonces, cada movimiento suyo es escrutado como una escena más del melodrama moderno que el público parece consumir con fascinación.
Cabe recordar, en tanto, que la historia entre Wanda Nara y Mauro Icardi ya no solo transcurre en portales ni en redes sociales, sino en tribunales. La relación, que durante años alimentó titulares y escándalos mediáticos, se encuentra en su etapa final, con una resolución judicial que podría cerrar definitivamente al menos ese capítulo. Tras una sentencia parcial de divorcio en Italia, ahora se espera una audiencia clave para finales de mayo, donde podría quedar sellada la disolución del matrimonio.
En diálogo con el equipo de A la Barbarossa (Telefe), Lara Piro, una de las abogadas de Icardi, confirmó que el encuentro judicial está previsto para el 27 o 28 de mayo y que, en principio, ambas partes deberán asistir de manera presencial. “Entiendo que tienen que ir ambos. Wanda no fue a la anterior y eso tuvo consecuencias. La jueza dictó la separación personal y se dio por hecho que esta próxima audiencia es directamente para el divorcio. Deberían quedar divorciados”, explicó en una conversación con Pía Shaw.