Mientras Jimena Barón transita las últimas semanas de su embarazo, tiene como fecha de parto el 24 de junio, junto a su pareja Matías Palleiro y su hijo Momo partieron para pasar el fin de semana largo en Quequén, localidad costera de la provincia de Buenos Aires. Desde allí compartió un look muy especial que lució una noche.
La cantante lució para una fiesta de gala un vestido que uso hace 11 años, precisamente cuando estaba en la dulce espera de su primer hijo. Ahora, de 7 meses y esperando otro varón, el primero con su actual pareja, volvió a ponerse un atuendo que le trae muchísimos recuerdos.
“Los papis de gala. La última es de 2013, mismo vestido y Momo en la panza”, escribió, junto a una dulce postal que se tomó con su novio acariciándole la panza y una de 2014 embarazada de Morrison, vistiendo el mismo atuendo: un vestido negro de mangas largas con detalles brillantes.
“Que bomba la mamá de Mateo. Como está choreando el papá de Mateo”, le dejó en los comentarios Matías, con mucho humor sobre las postales que subió la intérprete de “La tonta” y “Lo cobra”, junto a otros comentarios de famosos como Grecia Colmenares, Georgina Barbarossa, Marley y Macarena Rinaldi.
El desopilante viaje de Jimena Barón con Matías Palleiro y su hijo Momo a Quequén
El fin de semana largo que prometía ser una escapada relajada para Jimena Barón, su pareja Matías Palleiro y su hijo Momo, se convirtió en una serie de cómicos imprevistos, desvíos y discusiones, que la cantante compartió con mucho humor con sus seguidores en redes sociales.
A tan solo diez semanas de dar a luz, la actriz comenzó el viaje rumbo a la ciudad costera con la intención de disfrutar de unos días en familia. A través de una selfie desde el auto, mostró su panza y bromeó sobre el destino, escribiendo: “Adivinen si nos estamos yendo a Quequén”. Sin embargo, lo que parecía una salida tranquila pronto se transformó en una serie de incidentes que la cantante describió como una suerte de maratón familiar.
Según relató en sus redes sociales, las expectativas del viaje no coincidieron entre los miembros de la familia. Mientras que Palleiro se imaginaba disfrutando de postales de playa y sol con su familia, Barón se veía más bien como un “elefante marino varado en la arena”, comparando ambas expectativas en sus historias con un toque humorístico.
La logística del viaje también dio lugar a momentos de frustración. El empresario había calculado que llegarían “perfecto” a almorzar en casa, pero la realidad fue que el viaje se alargó, lo que obligó a la familia a improvisar una comida dentro del auto. En un tono irónico, Jimena explicó que la comida se redujo a papas fritas en un bowl mientras el vehículo permanecía detenido en la ruta.
La artista, fiel a su estilo, lo resumió sin filtros: “Él no quiere ir allá, quiere que vayamos como prófugos. ¿Cuál es la maldita obsesión masculina de ganarle minutos a la ruta? Estoy de siete meses, voy a orinar 12 veces, son 500 kilómetros. No sé si llego en pareja con este tipo. Perdón, hijo”.
Uno de los momentos más comentados en sus redes fue cuando la actriz hizo un comentario sobre el embarazo, señalando que su pareja pensaba que ella iba a parir un “tamagotchi” (un popular juguete de los años 90).
Finalmente, después de tantas situaciones imprevistas y con un tono humorístico, la familia llegó a su destino. En su última publicación sobre el viaje, Barón compartió: “Llegamos chicos, y nos separamos”, cerrando con ironía una experiencia que, a pesar de los contratiempos, dejó en evidencia el lado divertido de los viajes familiares.
