
En una jornada de celebración, Vicky Xipolitakis sorprendió a sus seguidores con un extenso y emotivo mensaje dedicado a su hijo Salvador Uriel, que cumplió cinco años. La publicación, compartida a través de su cuenta de Instagram, no se limitó al tono festivo habitual de los cumpleaños: fue una especie de carta pública en la que la exvedette se abrió con una franqueza inusual sobre su experiencia como madre, su cotidianidad como jefa de hogar y los momentos de fragilidad que atravesó en los últimos años.
El texto, acompañado por una imagen del menor fundido en un abrazo con su madre, se volvió rápidamente viral. Allí, la mediática reconstruyó en primera persona su vínculo con el niño, revelando con detalle cómo la maternidad transformó su vida, su carácter y su forma de enfrentar las dificultades.
“Nunca imaginé que alguien tan chiquito pudiera cambiarme tanto mi vida, desde que llegaste, mi corazón ya no me pertenece, vive en vos”, escribió al inicio del mensaje. A partir de allí, la publicación avanza como una suerte de confesión íntima que intercala ternura, cansancio, orgullo y una persistente sensación de resistencia frente a la adversidad.

En ese mismo tono, compartió: “Ser tu mamá me hizo descubrir el amor verdadero, me hiciste fuerte... y también vulnerable”. Más adelante, contrasta su vida personal con la imagen pública que suele ofrecer: “Muchos conocen solo mi sonrisa, pocos mi historia. Crío, corro, trabajo, cuido, acompaño, sostengo, protejo, abrazo, curo, enseño y muchas veces todo al mismo tiempo y sin descanso”.
El posteo, además, contiene referencias directas a las dificultades de criar sola: “Soy mamá de día, de noche, soy mamá siempre. Lo hago con amor y orgullo, porque a mi lado tengo lo más importante y porque él es mi prioridad, mi motor, mi todo”.

El relato no evita abordar los momentos más oscuros: “Había noches sin dormir y días en los que estuve al borde de caer”, reconoce, para luego explicar: “mi sonrisa fue mi escudo, una forma de protegerte y protegerme, una manera de decir ‘estoy bien’, aunque por dentro me estuviera desarmando. Crío sola, trabajo sin parar, sostengo, resuelvo, abrazo. Soy madre, y por vos soy invencible. Ser madre es ser hogar, es ser escudo, abrigo, refugio y fuerza”.
En medio del relato aparece una frase que condensa la metamorfosis emocional que implicó la llegada de Salvador: “Antes de vos, creía que era fuerte. Después de vos, entendí que el amor te vuelve invencible”. Además, proyectó a futuro al redactar: “Sé que un día vas a crecer y quiero que recuerdes a una mujer que aunque tuvo mil razones para rendirse, eligió seguir. Siempre por vos”.

En uno de los pasajes más resonantes, resignifica su presencia pública: “Esa sonrisa que ves... Es mi manera de decirte: ‘Estoy acá, siempre entera, para vos, por vos y con vos’. No hay maquillaje, ni fama que se compare con esto: sus risas, sus abrazos, su mirada, sus ‘te amo’. Acá es donde soy más feliz”.
En el cierre, llega el agradecimiento a su hijo: “Gracias por elegirme como tu mamá, mi amor eterno”. Y, como broche final, la sentencia que resume todo: “Ser tu mamá, es mi mayor victoria”.

Si bien en ningún momento del mensaje Vicky menciona explícitamente su situación judicial, el trasfondo es conocido. Desde su separación de Javier Naselli en 2019, la panelista de Cortá por Lozano mantiene un largo litigio en la Justicia.