En el hall del aeropuerto, con un semblante sereno y acompañado de quien define como “una gran mujer”, Jorge Martínez cerró un capítulo difícil de su vida para comenzar otro del otro lado del mapa. Después de un intento de suicidio y una internación en una clínica psiquiátrica, el actor fue visto junto a su pareja, la empresaria mexicana Daphne, antes de abordar un vuelo con destino a México. Ambos confirmaron ante las cámaras del programa A La Tarde (América TV) que viajarán “un tiempo” para descansar y reorganizar su vida.
“Yo estoy muy bien, haciendo lo que puedo”, respondió el actor cuando el cronista Oliver Quirós le preguntó por su estado de salud. Con voz calma, Martínez explicó que esta nueva etapa busca dejar atrás el episodio ocurrido en La Casa del Teatro y avanzar con mayor tranquilidad. “Vamos a renacer como ave fénix”, dijo Daphne, visiblemente emocionada, mientras confirmaba que dividirán su vida entre México y la Argentina.
La relación entre Jorge y Daphne no surgió en medio del caos reciente, sino que tiene raíces profundas. “Nunca hubo una ruptura, siempre estuvo el lazo”, aseguró Martínez ante las cámaras. Daphne coincidió: “Nunca nos dejamos de ver. Siempre nos hablábamos, siempre nos platicábamos”. Según contaron, se conocieron hace más de tres décadas y, aunque tomaron caminos distintos, mantuvieron un vínculo constante.
Cuando Martínez fue internado luego del dramático episodio en el noveno piso de La Casa del Teatro, Daphne viajó inmediatamente desde México. “Cuatro meses bastante difíciles”, resumió ella. Se instaló en Buenos Aires y lo acompañó durante todo el proceso de tratamiento. Fue ella quien lo acogió en su casa tras el alta, momento en que comenzaron a hablar de formalizar su relación.
“Una gran mujer que apareció en mi vida”, repitió Martínez, quien confirmó que su hija Agatha apoya esta nueva etapa: “Mi hija está encantada, recién tuvimos la última charla con ella y estamos bien”.
La pareja ya había iniciado los trámites para casarse. Según relataron en el programa conducido por Karina Mazzocco, habían obtenido turno en el Registro Civil de la calle Uruguay para el 15 de abril. “Tuvimos fecha para el 15 de abril y ya teníamos los pasajes sacados para esto”, explicó Martínez. Daphne agregó que, por el momento, posponen la boda hasta llegar a México, donde decidirán si concretan el casamiento allá.
Además de motivos afectivos, hay razones profesionales detrás de esta mudanza. “Él tiene contratos para hacer allá en México”, confirmó Daphne, anticipando que el actor podría retomar su actividad laboral en ese país. Consultados por el cronista sobre si se instalarán de forma permanente, Daphne respondió: “Un tiempo aquí, un tiempo allá. Hay que olvidar un poco el tema oscuro que tuvimos aquí y vamos a descansar allá para ser felices”.
Internación, rescate y apoyo tras bambalinas
El episodio que desencadenó este nuevo rumbo en la vida del actor ocurrió en La Casa del Teatro, el espacio donde residía desde hacía un tiempo. Según relató Jonathan, un empleado del establecimiento, encontró a Jorge Martínez al borde de una ventana en el comedor del noveno piso. “Me dijo: ‘Me quiero morir’. Lo agarré de los brazos, luego del hombro”, narró en diálogo con A La Tarde. Gracias a su intervención, la tragedia pudo evitarse.
La directora de la institución, Linda Peretz, confirmó que el actor fue trasladado a la clínica Ducont, especializada en salud mental. “Nosotros lo cuidamos muchísimo. Creo que está pasando por una depresión”, dijo al ser consultada sobre su estado. Luego de varias semanas de internación, Martínez recibió el alta a mediados de febrero.
Durante su recuperación, contó con el apoyo de su entorno más cercano. Su hija Agatha, fruto de su relación con Graciela Gramajo, explicó en un mensaje enviado al programa Puro Show: “Papá salió de la clínica hace ya varios días con su alta, terminó el tratamiento y en este momento está viviendo en un departamento”. Confirmó también el rol clave de Daphne: “Lo acompañó muchísimo en el tratamiento, estuvo presente, quiere estar presente y quiere ayudar”.
