Dalma Maradona, en diálogo con El ejército de LAM (Bondi), reconstruyó cómo se dieron sus primeros pasos en la actuación en un contexto marcado por las divisiones entre dos de los programas infantiles más populares de la televisión argentina: Chiquititas y Cebollitas. Consultada por Pepe Ochoa sobre si alguna vez había sido convocada para participar en Rebelde Way, la actriz fue tajante: “No, nunca, me hubiera encantado”.
Según explicó, la incompatibilidad se debía a la pertenencia de cada programa a grupos de producción distintos, con cierta rivalidad implícita. “Yo estaba en Cebollitas, que era la contra de Chiquititas. No había manera. O sea, nadie lo decía, pero era así”, recordó.
Durante la entrevista, Dalma ofreció un relato cargado de recuerdos personales al rememorar su fascinación adolescente por uno de los protagonistas de Rebelde Way, que se negó a revelar en un principio, pero que finalmente lo confesó. Aunque en un principio evitó identificarlo directamente, sugirió la intensidad de su interés juvenil con una frase elocuente: “Estaba enamorada de uno que… por poco no lo perseguí, pero ahí”.
La actriz añadió que el paso del tiempo le permitió reflexionar con algo de incomodidad sobre aquella situación. “Después trabajé con él y era tipo ‘perdóname, qué vergüenza, discúlpame que era tu stalker’”, confesó entre risas, mostrando cómo la distancia temporal transformó su fanatismo en una anécdota de tono casi cómico.
Además, relató que había invitado al actor a su fiesta de 15 años, lo cual, según sus palabras, terminó siendo “un papelón absoluto”. La elección de términos remarca el contraste entre la expectativa adolescente y la mirada adulta que ahora tiene sobre aquellos momentos.
Frente a la insistencia de Pepe, uno de los conductores del programa, terminó revelando de quién se trataba: “Si te digo que es uno de los protagonistas, es fácil, son dos. De uno soy amiga y el otro que me gustaba”. Con este pequeño desliz confirmó que su crush era nada más ni nada menos que Felipe Colombo.

Dalma compartió que no solo lo admiraba desde la distancia, sino que incluso él asistió a dos celebraciones muy significativas en su adolescencia. “Fue a mi cumpleaños de 14 y a mi fiesta de 15”, detalló. Estas afirmaciones sugieren que, más allá del fanatismo, existía un vínculo que le permitía cierto acceso al entorno del actor.
Al mencionar estas apariciones, la actriz reveló con naturalidad cómo la admiración adolescente podía traducirse en intentos de proximidad más concretos, como incluir a su “crush” en celebraciones personales. Estas situaciones, vistas con la perspectiva del tiempo, adquirieron para ella un carácter anecdótico, pero estuvieron cargadas de emoción en su momento original.
En el repaso de los recuerdos vinculados a su fiesta de 15 años, la hija del 10 agregó un dato inesperado: la presencia de Benjamín Rojas, otro de los protagonistas de Rebelde Way. “Se coló Benjamín Rojas, porque era en La Bombonera, tocaban Los Piojos, Los Auténticos Decadentes… Le pareció el plan de la vida, se coló y ahí me hice amiga”, relató.
Hacia el final de la entrevista, Dalma Maradona se permitió una reflexión sobre la intensidad y multiplicidad de sus intereses amorosos en la adolescencia. “Está re mal esto que estoy haciendo, pero estoy diciendo la verdad absoluta. A mí no me gustaba solo Felipe, me gustaban un par”, confesó.
Esta frase deja entrever una etapa de su vida marcada por el entusiasmo adolescente, en la que los vínculos con figuras públicas del entretenimiento juvenil ocupaban un lugar central en su imaginario afectivo. En ese contexto, explicó que su madre jugó un rol importante en facilitar el acercamiento a uno de sus ídolos: “Lo invitó mi mamá como para darme la sorpresa”.