Cada 31 de marzo, el corazón de Nico Vázquez late con una mezcla de amor infinito y una tristeza que nunca se apaga. Es la fecha en la que su hermano, Santiago Vázquez hubiese celebrado su cumpleaños. Este lunes, el actor y director no dejó pasar la oportunidad de homenajearlo con un sentido mensaje en redes sociales que conmovió a sus más de cuatro millones de seguidores.
“Feliz cumple, San. Seguimos juntos y así será. Siempre juntos, espalda con espalda, corazón con corazón. Gracias por guiarme, cuidarme y estar con nosotros en cada momento. ¡Te amo!”, escribió el actor en su cuenta de Instagram, junto a una serie de imágenes que reflejan la esencia de su hermano menor: sonrisas cómplices, abrazos sinceros y una conexión inquebrantable.
Santiago Vázquez falleció inesperadamente el 16 de diciembre de 2016, a los 27 años, víctima de una muerte súbita mientras disfrutaba de unas vacaciones con amigos en Punta Cana, República Dominicana. Su partida dejó un vacío imposible de llenar, pero su presencia sigue viva en cada recuerdo y en cada gesto de amor de su hermano mayor.
Uno de los homenajes más conmovedores de Nico fue compartir hace un par de años un antiguo relato de Santi que encapsula a la perfección el vínculo que los unía. Se trata de una anécdota de su infancia, un texto escrito por el propio Santiago.
“Hace poco, encontré este texto que escribió mi hermano, y yo tengo el VHS”, introdujo el intérprete antes de revelar la emotiva historia.
En el relato, Santiago recordaba con lujo de detalles el día en que participó en una competencia de resistencia escolar. Su entrenador lo apodaba ‘el genio’ por su destreza y lo hacía competir con chicos más grandes, convencido de que podía destacar. Aquel día, Nico lo acompañó al torneo intercolegial, pero su presencia fue mucho más que la de un simple espectador.
“Acompañar para Nico significó hablar con mis compañeros, decirles que me cuiden, que nadie me toque mientras corra, hacerme masajes en las piernas y ejercicios para calentarlas, contarme historias de gente que ante lo imposible hizo historia, hablar con mis profesores sobre la carrera y cómo tenía que encararla para ganar”, escribió Santiago.
La carrera fue brutal. La competencia era feroz, el terreno estaba lleno de arena, barro, médanos y pasto. En un colegio pequeño como el suyo, las condiciones no estaban dadas para enfrentar semejante desafío. Pero Santi se esforzó al máximo. Cuando ya no podía más y faltaban apenas 200 metros para la meta, escuchó una voz familiar a su lado: “¡Dale, Forrest, que queda poco! ¡Dale!”.
Era Nico, que había cruzado la valla para correr junto a él. Su sola presencia le dio el impulso que necesitaba para llegar al final. Pero el gesto no pasó desapercibido: una organizadora comenzó a gritarle que debía salir de la pista, y los demás padres se sumaron al reclamo. Sin discutir, Nico se apartó, pero no dejó de correr. Desde el otro lado de la cinta, siguió acompañando a su hermano hasta que cruzó la meta.
Santi quedó en noveno lugar, pero el resultado ya no importaba. Lo que recordaría para siempre era el amor incondicional de su hermano. Al subir al micro de regreso, su entrenador le dijo: “Tuviste mucha suerte, Vázquez, de que no te descalifiquen. Fue una locura eso”. Santi, aún con la adrenalina a flor de piel, le restó importancia. Pero el entrenador insistió: “En mis 20 años de carrera, nunca vi un antecedente así. Sí, tuviste suerte, Vázquez. Nico cambió las cosas por vos”.
Tras compartir la historia, Nico cerró su publicación con una frase que resume el lazo eterno que los une: “Te amo, San. ¡Siempre juntos!”
Desde su partida, Nico Vázquez encontró múltiples maneras de mantener vivo el recuerdo de su hermano. Lo menciona en entrevistas, lo homenajea en el teatro, lo recuerda en cada fecha especial. Y aunque el dolor de su ausencia es inmenso, el amor y la admiración que siente por él lo impulsaron a transformar su duelo en un testimonio de hermandad y resiliencia.
El posteo de este 31 de marzo no fue la excepción. Sus palabras resonaron en el corazón de sus seguidores, quienes no tardaron en llenarlo de mensajes de apoyo y amor. “Siempre juntos”, repiten una y otra vez, como un mantra que trasciende el tiempo y el espacio.
Santiago Vázquez hubiese cumplido 36 años este lunes. Pero en la memoria de su hermano y de todos los que lo conocieron, su luz sigue brillando con la misma intensidad de siempre.
