El 11 de marzo de 2022, Gerardo Rozín falleció a los 51 años, luego de luchar contra un tumor cerebral que lo aquejó durante el último año de su vida. A tres años de su partida, Carmela Bárbaro, su expareja y madre de su hija Elena, lo recordó con cariño al aire de Puro Show (El Trece).
Carmela brindó la entrevista desde su casa, ya que decidió quedarse allí para acompañar a su hija en este duro día. “Estoy haciendo esta nota porque te quiero mucho a vos, porque sos parte de que hoy yo pueda estar entera como estoy, estoy muy agradecida, me contuvieron, me respetaron en momentos muy difíciles”, fueron las palabras que le dedicó la periodista a Pampito, su amigo y conductor del ciclo.
“Bien, es un día feo, movilizante. Intento llenarlo de recuerdos lindos, hoy estamos en otra etapa del duelo, yo ya no lloro tanto, intento quedarme con las cosas buenas, pero no deja de ser un día de mier...”, fue la respuesta que dio a cómo se encontraba a tres años de la muerte de su exmarido. “Nuestro plan para hoy era otro, que cambió justamente porque prioricé estar en casa con ella (su hija), para hacerle unos mimos, para estar presente. Entendiendo y respetando que hay momentos para todo”, expresó profundamente conmovida.
Diego Leuco, quien hoy en día ocupa el rol de conductor de La Peña del Morfi (Telefe), el programa que Gerardo creó y condujo hasta que su enfermedad avanzó, también habló en el mismo programa y contó la conexión que tiene con el productor, que va más allá del programa de Telefe.
“Vivo en el departamento de Gerardo. Es una de esas casualidades, es muy loco, muy circular”, contó en el móvil y rápidamente agregó: “Yo alquilo ahí y cuando lo hice no sabía que había sido la última casa de Gerardo. Cuando firmé el de la inmobiliaria, casi como un chiste, me dice ‘Acá vivía Gerardo’”.
En ese momento, Leuco no tenía nada que ver con el programa de los domingos, tan solo algunas conversaciones con el rosarino acerca de la posibilidad de formar parte: “Mi único vínculo es que ya había hablado muchas veces y Gerardo me decía ‘cómo te veo en La Peña, qué cosa para vos’. Hablábamos mucho por WhatsApp”. Es por eso que al enterarse lo del departamento su primera reacción fue comunicarse con Bárbaro. “Yo ya alquilé, pero me sentiría mal de no decírtelo. Yo lo siento como una señal porque con Gerardo siempre tuvimos un vínculo hermoso y quería compartirlo”, recordó acerca del llamado telefónico que tuvo con su colega.
A los meses de esta conversación recibió el llamado para convertirse en el conductor del ciclo: “Imposible no pensar en Gerardo, imposible no pensar las veces que hablamos de La Peña, las veces que mi viejo me había dicho que era el programa justo para mí. Soy plenamente feliz”. Cabe recordar que al año de su muerte, sus exparejas y sus dos hijos, Elena y Pedro, publicaron un video y comunicado que él mismo había preparado y en este decía que lo podían recordar en los lugares donde suenen determinadas canciones. Sobre esto, Diego dijo: “Me armé una playlist con las canciones y cada tanto las pongo. Casi todos los días pienso en Gerardo porque vivo ahí”, cerró.
A pesar de que los años pasan, el legado de Rozín sigue intacto: su programa lleva alegría a sus seguidores, sus exparejas lo recuerdan con cariño y sus hijos lo llevan en la memoria todos los días.