El viaje de Mauro Icardiy la China Suárez por Milán da para todo tipo de conjeturas. El futbolista y la actriz se pasean por la ciudad del norte de Italia a poco menos de un mes de haber blanqueado su relación. Lo que podría ser un destino ocasional para el primer viaje de enamorados cobra un giro dramático, ya que es un escenario muy ligado a la historia de amor entre el delantero y Wanda Nara.
La pareja no terminó de la mejor manera y actualmente enfrenta un resonante conflicto mediático y judicial, que incluye desde cuestiones económicas a las vinculadas a sus dos hijas, Francesca e Isabella. Y en ese contexto, cualquier detalle se magnifica.
Eugenia y Mauro suelen postear algunos momentos destacados de su viaje, una suerte de diario para nada íntimo de la excursión. A veces, son instantáneas puntuales de su recorrido. En otras, elige desplegar un álbum de fotos que simboliza acción, un movimiento por paisajes y sensaciones propios de una pareja que transita una especie de luna de miel.
Así, por ejemplo, surgieron unas cuantas coincidencias con el pasado de Wanda y Mauro en la ciudad donde nacieron sus hijas y donde él se convirtió en figura del Internazionale. En esta oportunidad, compartieron looks, gastronomía, exteriores, intimidad y un detalle particular que levantó todo tipo de suspicacias.
En esta oportunidad, la actriz de Casi Angeles puso el foco en varios aspectos de sus últimas horas en Italia. La gastronomía, uno de los atractivos de cada viaje, repartida entre pizzas en la habitación y las salidas a comer a El Porteño, donde degustó un plato de pastas. También una llamativa postal de Mauro, con el torso desnudo y un toallón anudado a su cintura, asomándose por uno de los balcones.
Por su parte, el rosarino mostró el look de su novia en el interior de un automóvil de lujo: una campera negra de cuero con cuello en tono beige y varios parches bordados en los costados, leggings de efecto vinilo en color negro, ceñidos y brillantes, y unas botas altas y ajustadas de tacón de aguja en tela negra.
Pero lo que llamó la atención es la última imagen del álbum. Se trata de un naipe de baraja francesa, el 10 de diamantes, arrugado en cuatro dobleces y una declaración de amor rubricada con las iniciales de ambos y un corazón. Más allá del romanticismo casi adolescente de la postal, la simbología de la mencionada carta no pasó desapercibida para sus seguidores.
Es que si bien la baraja francesa no forma parte del tarot tradicional, algunas lecturas las asocian con significados específicos tales como el éxito financiero y la prosperidad económica, la riqueza a largo plazo y los viajes con un carácter expansivo con el augurio de beneficios materiales. Una interpretación que parece hablar del presente de la pareja, regida por el lujo y la fascinación que muestran en la capital de la moda italiana, pero también se relaciona con algunas versiones que coloca a los novios viviendo lejos de Buenos Aires.
Se sabe que Icardi integra el plantel del Galatasaray de Turquía, y actualmente se recupera de una operación en una de sus rodillas. La posibilidad de que ambos se muden a Estambul, o que al menos la China lo visite con frecuencia, es uno de los ejes que enfrenta el futbolista en su escandalosa separación de Wanda Nara. En el medio, el futuro de Francesca e Isabella, las hijas que tuvo la empresaria y que durante un tiempo vivieron con él en la ciudad otomana. Una historia que se definirá en tribunales, pero, mientras tanto, parece alumbrar algunas señales que van más allá de la formalidad y la ley.