A casi seis meses de haber sido internado, Jorge Lanata sigue luchando por su salud. Desde su ingreso, el periodista atravesó diferentes situaciones que pusieron en riesgo su vida y lo llevaron a tratar una trombosis venosa profunda con la esperanza de poder recuperarse. Ante ese panorama, este jueves, su esposa Elba Marcovecchio contó sus sensaciones y cómo vive la evolución del conductor.
Conociendo la delicada situación, Ángel de Brito le preguntó a la abogada cómo estaba. Si bien podía parecer una pregunta casual, Marcovecchio no ocultó la carga emocional que maneja: “Empezaste con la pregunta más difícil, sabés que no sé qué contestarte. Me dejaste sin palabras. Estoy en una mezcla de angustiada, esperanzada, con fe. Hay momentos que es difícil sentir. Y entonces yo prefiero ver”.
Luego, la letrada se sinceró y expresó sus preocupaciones. “Jorge la está peleando. Es increíble la batalla que está dando. A mí me llena de orgullo. No te voy a negar que tengo miedo, es ese trípode entre la angustia y la ansiedad de no saber dónde estás parado. Cada día que pasa en terapia no cuenta a favor. Esa es una realidad. Y el estado de Jorge es oscilante. Y esas oscilaciones hacen que a la noche no duerma”, dijo en LAM (América).
Al escuchar la emoción de la abogada, el conductor le preguntó si soñaba con Jorge. “Yo lo extraño. Acá está la silla de Jorge en el comedor, que nadie la usa. Y esa silla está esperando a Jorge. Lo quiero ver en casa. Lo que extraño es lo más simple, acá tengo la compu que me regaló Jorge, que es una computadora bien grande, que la uso con él. Y la serie que estábamos viendo, que son de policías medios corruptos, esas series que le gusta ver a Jorge, y yo no la sigo viendo sin él, Sería una infidelidad”, afirmó Elba.
Luego, el periodista le consultó cómo hacía para comunicarse con Lanata. “Es difícil, es increíble ver a alguien tan grandote, fuerte y protector como él vulnerable. Es durísimo un hospital. Jorge ve el mundo a través de nuestras caras. Le hablo, él conecta con la música clásica, a mí me gusta más la ópera, pero lo exalta un poco”, detalló Marcovecchio. Por último, de Brito le preguntó por qué ya no había tantos partes médicos, a lo que Elba expresó: “Porque está en una terapia, es un día a día. Jorge tiene muchas cositas que están dando vueltas, hay una realidad, si él estuviera bien estaríamos programando el traslado a Santa Catalina. Tampoco es que está mal, pero es un día a día, un minuto a minuto”.
Hace una semana, el equipo de especialistas que cuida la salud del periodista dio a conocer un nuevo parte médico. En el mismo se indicaba que “el paciente Jorge Ernesto Lanata continuaba internado en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Italiano de Buenos Aires. Según el detalle, en ese momento se encontraba vigil, afebril, en ventilación mecánica durante la noche, mientras que durante el día con ventilación espontánea. Además, hemodinámicamente estable y no requiere drogas vasoactivas. El tratamiento incluye anticoagulante debido a una trombosis venosa profunda en miembro superior, y sigue con rehabilitación motora y fonoaudiológica, mostrando una buena respuesta. Se prevé que el paciente permanezca internado en este servicio hasta completar su tratamiento”.
La información que brindaron los médicos del Hospital Italiano coincide con las declaraciones que brindó su esposa, Elba Marcovecchio, quien señaló que el estado de Lanata a partir de la detección de la trombosis en un brazo “no es grave. Jorge estuvo sin fiebre, pero tiene una infección que los médicos tratan”. Al mismo tiempo, la abogada expresó nuevamente su confianza en que la salud del periodista mejore: “Está en el mejor lugar y muy bien tratado. Todos estamos con mucha fe. Está en excelentes manos, los médicos anticipan cada una de las cosas. Acá le salvaron seis veces la vida”.
Por el momento, y según se infiere del texto del parte médico, el nuevo traslado de Lanata a la clínica de rehabilitación Santa Catalina, donde estuvo en dos oportunidades en los últimos meses, deberá esperar hasta estar recuperado del nuevo escenario que representa la trombosis. “Necesitan un paciente estable, por lo que Jorge tiene que llegar a ese estado para eso. Él está en camino a eso”, sostuvo ante la guardia periodística que la aguardó en la puerta del hospital.