Guardar
El artículo explora alternativas a
El artículo explora alternativas a Roblox, Fortnite, Free Fire y Minecraft para niños pequeños que inician en los videojuegos. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Hay vida más allá de Roblox, Fortnite, Free Fire y Minecraft. Si bien estos suelen ser los videojuegos con los que muchos niños empiezan a disfrutar de este hobby, personalmente no creo que sea el camino ideal cuando se trata de algunos más pequeños, que apenas están empezando a tener habilidades motoras, de seguimiento de órdenes y compresión de objetivos.

Junto con mi hija de cuatro años pasamos un largo camino desde el momento en el que ella quiso jugar por primera vez, hasta que finalmente lo disfrutó y lo puede hacer, en cierta medida, sola y sin mi ayuda.

Para llegar a ese objetivo pasamos por muchos juegos, algunos de ellos con muy poco éxito y otros, como los siguientes tres que les voy a contar, ideales para que un niño de esta edad empiece a disfrutar de los videojuegos, evitando que sea un momento de pelea entre padre e hijo y que genere frustración al punto de no querer volver.

Videojuegos ideales para que un niño pequeño empiece a jugar

Este listado es algo muy personal, ya que cada padre e hijo van a su ritmo y lo importante es saber escuchar a los más pequeños, entender qué pueden hacer y qué no.

  • Bluey: el videojuego

Este fue el punto de partida de todo este largo camino. Si bien ya habíamos intentado algunas pequeñas veces jugar o que mi hija moviera el control. Fue con Bluey la primera experiencia que completamos y le invertimos una cantidad de horas importantes.

Bluey es presentado como un
Bluey es presentado como un juego sencillo y cálido que ayuda a los niños a desarrollar habilidades básicas de control.

Este es un juego lindo y sencillo: somos uno de los integrantes de la familia de Bluey y viviremos una corta experiencia dividida en capítulos, en la que cada una parecerá un episodio de la serie de televisión. Moveremos al personaje por el escenario recogiendo objetos, saltando obstáculos y realizando tareas muy fáciles para ellos.

Lo más importante que descubrimos en este juego fue un problema, que no veía venir por ningún lado: la dificultad de mi hija para detenerse en el punto exacto que el juego le pedía. Si bien ella no tuvo problemas para mover el personaje, si los tenía parar justo donde debía, entonces muchas veces seguida de largo, generándole mucho desespero.

Con el tiempo esto se fue puliendo y la calidez del juego ayudaba a que no fuera un obstáculo para seguir. Aunque en algunas sesiones de juego debíamos parar, regular los ánimos y luego seguir o esperar un par de días.

  • PAW Patrol: Mighty Pups Save Adventure Bay

Los juegos licenciados son un camino ideal. Porque los más pequeños ya tienen una relación con lo que ven en pantalla y entienden de qué trata todo lo que están haciendo. Mi hija sabía que con este juego de PAW Patrol tenía que hacer pequeñas misiones con diferentes personajes.

PAW Patrol: Mighty Pups Save
PAW Patrol: Mighty Pups Save Adventure Bay se destaca por su relación con personajes conocidos y su variedad de minijuegos educativos.

Y este fue el mejor juego con el que logramos crear ese lazo de disfrute. Al ser un juego con entornos más grandes y objetivos más claros, fue más fácil para ella moverse y dirigir lo que debía hacer.

Además, contiene muchos minijuegos que le permiten entender mejor el funcionamiento del control y cómo debe cogerlo. Los tutoriales son claros y mi ayuda era mínima, siendo ideal para pasar el tiempo de juego sin tener que generar fricciones, porque como adultos vemos esos desafíos como algo demasiado fáciles de entender.

Este juego también contiene una gran variedad de niveles y cada personaje funciona diferente, lo que hace que la experiencia sea más refrescante y menos repetitiva.

  • Barbie: Proyecto Amistad

Quizás este juego para algunos niños no sea el más llamativo por la temática o los personajes. Pero la clave aquí está en entender el concepto de lo que es el juego.

Barbie: Proyecto Amistad es recomendado
Barbie: Proyecto Amistad es recomendado para trabajar la ubicación espacial y la comprensión de objetivos en los niños.

Esta es una experiencia más compleja y que requiere un nivel mayor de habilidad y entendimiento, incluso mi hija todavía no logra dominarla completamente. Pero lo mejor que tiene este juego es la necesidad de la ubicación espacial.

El objetivo general es reconstruir un parque acuático y tendremos que movernos por diferentes escenarios para realizar ciertas misiones. Esto lleva a que los niños deban entender dónde están y para dónde ir según lo que les pide. Una habilidad que es fundamental en la vida diaria y que en los juegos se convierte en una mecánica más para títulos más complejos.

En caso de que la temática de Barbie no sea del agrado, otro juego similar puede ser Disney Dreamlight Valley, aunque es más complicado de manejar en algunos casos.