Guardar
Desde el 2018, Google permite
Desde el 2018, Google permite que los dispositivos Android cuenten con un DNS privado. (Imagen ilustrativa)

Google introdujo en 2018 una función clave de seguridad en su sistema operativo móvil: el DNS sobre TLS, también conocido como DNS privado. Desde Android 9 en adelante, los usuarios cuentan con la posibilidad de cifrar el tráfico de sus consultas DNS, tanto en la navegación como en el uso de aplicaciones, reduciendo los riesgos de espionaje y ataques informáticos.

Esta herramienta, sin embargo, depende de que el proveedor de servicios de Internet (ISP) soporte el protocolo, lo que obliga a algunos usuarios a comprobarlo o incluso a optar por un servicio alternativo.

El protocolo DNS (Domain Name System) es una pieza fundamental en el funcionamiento de Internet. Cada vez que accedemos a una página web o a un servicio en línea, nuestro dispositivo necesita resolver la dirección IP asociada al nombre de dominio. Tradicionalmente, este intercambio de información se realizaba sin ningún tipo de cifrado, lo que lo hacía vulnerable a interceptaciones o manipulaciones por parte de atacantes.

Conoce cómo tener un DNS
Conoce cómo tener un DNS privado. (Imagen ilustrativa)

Con la llegada del DNS sobre TLS, las consultas se envían a través de un canal seguro basado en la capa de transporte (TLS), lo que asegura que la comunicación entre el usuario y los servidores de nombres esté protegida contra escuchas ilegales o modificaciones maliciosas.

La importancia de esta mejora radica en que casi todo lo que hacemos en Internet comienza con una consulta DNS: abrir una página, usar una aplicación, enviar un correo o reproducir contenido en streaming.

Cifrar esta primera capa de comunicación se ha convertido en un requisito esencial para garantizar la privacidad y la seguridad en la red, más aún en dispositivos móviles, que suelen conectarse a redes WiFi públicas o de terceros con menor nivel de protección.

Conoce cómo tener un DNS
Conoce cómo tener un DNS privado. (Imagen ilustrativa)

Cómo saber si tu proveedor admite DNS privado

Aunque la función de DNS privado está disponible en Android desde 2018, su uso real depende del soporte que ofrezca cada proveedor de servicios de Internet. Para comprobarlo existen herramientas como las pruebas de Safer.com, que permiten verificar si el canal de comunicación está realmente protegido por TLS. En caso de que el ISP no ofrezca compatibilidad, el usuario tiene la opción de configurar manualmente otros proveedores de confianza, como Google Public DNS o los servidores de Cloudflare.

Pasos para habilitar un DNS privado en Android

El procedimiento para activar o cambiar un DNS privado puede variar ligeramente según la capa de personalización de cada fabricante, pero en general los pasos son los siguientes:

  1. Abre la sección de ajustes o configuración en tu dispositivo Android.
  2. Accede al apartado Conexiones > Internet y redes > DNS privado.
  3. De forma predeterminada, la opción estará en “Automático”. Allí puedes elegir cambiarla.
  4. Selecciona Nombre de host del proveedor de DNS privado e ingresa el correspondiente.
    1. Para Google DNS: dns.google.
    2. Para Cloudflare DNS: 1dot1dot1dot1.cloudflare-dns.com.
  5. Guarda la configuración y reinicia el teléfono para que los cambios tengan efecto.
Conoce cómo activar un DNS
Conoce cómo activar un DNS privado. (Android)

Una vez configurado, el sistema operativo se encargará de enviar todas las consultas DNS a través del canal cifrado, tanto en la navegación como en las aplicaciones instaladas.

Un refuerzo sencillo y gratuito

El uso de DNS privado no solo protege frente a intentos de espionaje, sino que también mejora la integridad de las conexiones al evitar que terceros manipulen las respuestas DNS. Además, es una función gratuita, integrada en Android, y que requiere únicamente de unos minutos para ser configurada.

En un contexto donde la privacidad digital es cada vez más valorada, habilitar un DNS privado en el smartphone se convierte en una medida sencilla pero poderosa. Tanto si se utiliza el servicio del propio proveedor de Internet como si se opta por alternativas como Google o Cloudflare, el resultado es una conexión más segura y confiable en el día a día.