Los errores más comunes al usar la carga rápida del celular que pueden dañar la batería

Verificar la compatibilidad de carga rápida antes de usar un cargador es uno de los aspectos que se deben tener en cuenta para evitar daños en la batería del teléfono

Guardar
Usar adaptadores de carga original
Usar adaptadores de carga original garantiza eficiencia y protege el dispositivo contra sobrecalentamientos y fallos eléctricos. (Imagen Ilustrativa Infobae)

A pesar de las ventajas que ofrece la carga rápida, esta tecnología no está exenta de riesgos, y el uso indebido de esta tecnología puede llevar a una degradación prematura de la batería, reduciendo su vida útil y comprometiendo el rendimiento del celular.

Por eso evaluamos cada uno de los errores más comunes cometidos por los usuarios al cargar sus teléfonos móviles y cómo estos afectan la salud de las baterías.

Cuáles son los errores al usar la carga rápida

  • No tener un teléfono compatible con carga rápida

Uno de los primeros errores que cometen muchos usuarios es no verificar si su teléfono es compatible con la tecnología de carga rápida antes de utilizarla. Aunque la mayoría de los smartphones modernos incorporan esta característica, algunos modelos más antiguos o de gama baja no están diseñados para soportar cargas rápidas.

Si se intenta utilizar un cargador rápido en un dispositivo no preparado para ello, no solo se afectará la velocidad de carga, sino que se corre el riesgo de generar sobrecalentamiento y un desgaste prematuro de la batería.

La velocidad de carga no
La velocidad de carga no depende solo del cargador, sino también de las capacidades del dispositivo. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El sistema de carga rápida no depende únicamente de un cargador adecuado, sino también de la capacidad del teléfono para gestionar esta potencia de carga. Por ejemplo, aunque un cargador rápido pueda estar disponible, si el teléfono no está diseñado para manejar una carga a alta velocidad, este no podrá aprovechar al máximo la potencia del cargador, lo que puede resultar en un calor excesivo que afecte a la batería a largo plazo.

  • No usar el adaptador de carga correcto

El uso de un adaptador no compatible con el dispositivo es otro de los errores más comunes al cargar un smartphone. Aunque muchos usuarios optan por cargadores genéricos o de otras marcas pensando que ofrecerán la misma eficiencia, esto rara vez es el caso. Cada fabricante diseña sus adaptadores para que estén optimizados específicamente para sus modelos, asegurando una carga eficiente y segura.

Al utilizar un cargador no original, se pueden generar problemas como una carga más lenta, un sobrecalentamiento del dispositivo e incluso fallos eléctricos que dañen la batería y otras partes del teléfono.

Además, los cargadores originales no solo están diseñados para cargar rápidamente, sino que también incluyen mecanismos de protección para evitar fluctuaciones de corriente que podrían dañar el dispositivo. Usar un cargador incorrecto o de baja calidad puede poner en peligro la integridad del smartphone, lo que puede llevar a fallos más graves con el tiempo.

Los accesorios no originales pueden
Los accesorios no originales pueden reducir la vida útil de la batería y comprometer la seguridad del smartphone. (Imagen Ilustrativa Infobae)
  • Creer que el cargador es el único factor determinante

Un concepto erróneo común es pensar que el cargador es el único elemento que determina la velocidad de carga de un teléfono. En realidad, el dispositivo también juega un papel fundamental en este proceso. Aunque se utilice un cargador de alta potencia, la velocidad de carga depende en gran medida de la capacidad del teléfono para manejar esa potencia.

Muchos smartphones tienen un límite específico para la velocidad de carga, y si se excede este límite, el teléfono reducirá automáticamente la velocidad de carga para evitar daños a la batería.

Por ejemplo, incluso si se conecta un cargador de 120W a un teléfono que supuestamente soporta esa velocidad, el dispositivo solo aceptará una cantidad de energía acorde a sus capacidades, lo que puede dar lugar a una carga más lenta de lo esperado. Esta medida de seguridad está diseñada para proteger tanto la batería como el propio teléfono, evitando que se sobrecalienten o sufran daños irreversibles.

  • Usar accesorios no originales

El mercado está lleno de accesorios compatibles, pero no originales, que prometen funcionar igual que los oficiales, pero a un precio más bajo. Aunque estos productos pueden parecer una alternativa atractiva, el riesgo de dañar el dispositivo o reducir la vida útil de la batería no justifica el ahorro. Los cargadores y cables originales están específicamente diseñados para funcionar con un teléfono determinado, y son sometidos a rigurosas pruebas de seguridad y eficiencia.

Utilizar cables certificados para carga
Utilizar cables certificados para carga rápida minimiza riesgos de sobrecalentamiento y garantiza una carga eficiente. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El uso de accesorios no originales puede llevar a una carga ineficiente y poner en riesgo la seguridad del dispositivo. Incluso si un cargador o cable compatible parece funcionar correctamente, estos accesorios no siempre cumplen con los estándares de calidad necesarios para garantizar una carga rápida segura. En algunos casos, los cables no originales pueden no soportar la corriente requerida para una carga rápida, lo que puede generar un sobrecalentamiento y daños en la batería.

  • Utilizar cables inadecuados para la carga rápida

No todos los cables son aptos para soportar la alta corriente necesaria para la carga rápida. Utilizar un cable estándar en lugar de uno certificado para esta tecnología puede resultar en una carga mucho más lenta de lo esperado, y además, puede generar un sobrecalentamiento que afecte tanto al cable como al teléfono.

Los cables diseñados para la carga rápida están construidos con materiales que permiten manejar la corriente de forma segura y eficiente, reduciendo el riesgo de fallos eléctricos.

Los fabricantes diseñan cargadores originales
Los fabricantes diseñan cargadores originales con mecanismos de protección contra fluctuaciones de corriente. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Además, los cables de baja calidad o incompatibles pueden dañarse fácilmente y exponer los cables internos, lo que aumenta el riesgo de cortocircuitos y otros problemas eléctricos. Por lo tanto, siempre es recomendable utilizar cables certificados que sean capaces de manejar las altas corrientes requeridas por la carga rápida sin comprometer la seguridad.

  • Usar fundas o protectores durante la carga rápida

El sobrecalentamiento es uno de los principales enemigos de las baterías de litio, que son las utilizadas en la mayoría de los smartphones actuales. Durante el proceso de carga rápida, se genera una cantidad significativa de calor, y si el teléfono está protegido por una funda gruesa o mal diseñada, este calor puede quedar atrapado, lo que aumenta la temperatura interna del dispositivo. Esto puede provocar una degradación más rápida de la batería y reducir su capacidad de retener carga con el tiempo.