Sigue estos siete hábitos si la batería de tu celular se descarga muy rápido

Si la batería de tu celular se descarga muy rápido, es posible que estés repitiendo hábitos que afectan su rendimiento sin saberlo, como mantener la pantalla con un brillo demasiado alto. Cuanto más brillante sea, más energía consume, según un estudio de la Purdue University.

La mayoría de los teléfonos incluye una función que ajusta automáticamente el brillo de la pantalla según la iluminación del entorno. No se trata necesariamente de reducir el brillo mientras usas el dispositivo, sino de hacerlo cuando no lo estás utilizando.

Una forma efectiva de lograrlo es configurar el tiempo de inactividad de la pantalla para que sea lo más corto posible. Así, el teléfono apagará la pantalla de manera automática cuando no esté en uso.

• Usar WiFi en vez de datos móviles.

Conectarse a una red WiFi consume menos energía que navegar con datos móviles. Cuando el dispositivo usa datos, se esfuerza más por mantener la señal con la antena de red, lo que incrementa el gasto de batería. Siempre que sea posible, conviene preferir una conexión WiFi estable.

• Mantenerlo en una temperatura adecuada.

Las baterías de litio se ven afectadas por temperaturas extremas. El calor excesivo acelera su desgaste, mientras que el frío puede reducir temporalmente su rendimiento. Se recomienda mantener el celular entre 20 °C y 25 °C, evitando dejarlo expuesto al sol, dentro del auto o cerca de fuentes de calor.

• Actualizar el sistema operativo.

Las actualizaciones del sistema operativo suelen incluir mejoras de eficiencia energética. Además, corrigen errores que pueden estar afectando el consumo de batería. Tener el sistema actualizado ayuda a que el dispositivo funcione de manera más fluida y con menor esfuerzo.

• Mantener la batería en aproximadamente 80%.

Evitar cargar la batería al 100% de forma constante puede prolongar su vida útil. Muchos fabricantes recomiendan mantenerla entre el 20% y el 80% como rango ideal. Cargarla completamente o dejar que se agote por completo de forma frecuente puede deteriorarla más rápido.

• Usar solo las aplicaciones necesarias.

Tener muchas aplicaciones abiertas o funcionando en segundo plano incrementa el consumo energético. Cerrar las que no se estén usando y desinstalar las que no se necesitan permite reducir la carga de trabajo del dispositivo y optimizar el uso de la batería.

• Revisar siempre el estado de la batería.

Tanto Android como iOS ofrecen funciones para consultar la salud de la batería. Esta revisión permite saber si está funcionando correctamente o si presenta algún deterioro. Detectar a tiempo una disminución en su capacidad puede ayudar a tomar decisiones, como reducir la carga de procesos o considerar un reemplazo.

Una de las prácticas más efectivas es mantener la carga entre el 20 % y el 80 %, evitando tanto las descargas completas como las cargas al 100 % de manera frecuente, ya que estos extremos aceleran el desgaste de las baterías de litio.

También es fundamental utilizar el cargador original o uno certificado por el fabricante, ya que los accesorios de baja calidad pueden dañar el dispositivo. Durante la carga, lo ideal es no utilizar el celular, ya que esto eleva la temperatura y reduce la eficiencia del proceso.

Evitar cargarlo durante la noche es otra recomendación habitual o por mucho tiempo sin supervisión, ya que muchas horas conectado puede generar un calentamiento constante. Siempre que sea posible, se aconseja cargarlo en modo avión o apagado, y en un entorno fresco, lejos del sol o de fuentes de calor.

Además, aunque las cargas rápidas son útiles, no deben emplearse todo el tiempo, ya que generan más calor y estrés en la batería.