Google crea una IA especializada en robots que organizan la cocina, empacan comida y muchas más tareas del hogar

Gracias a esta nueva inteligencia artificial, los robots pueden interactuar de manera más eficiente con su entorno y establecer una comunicación más natural con los seres humanos

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Los robots puede manipular objetos, interactuar entre ellos así como responder ante situaciones que se cambian en tiempo real. (YouTube: Google DeepMind)

Google ha desarrollado dos modelos de inteligencia artificial especializados en robots, capaces de realizar tareas cotidianas de manera similar a los seres humanos.

Estos robots pueden, por ejemplo, ordenar un escritorio, empacar comida en una lonchera, manipular frutas y verduras, borrar un tablero e incluso encestar en un mini basketball. Estos avances reflejan el progreso de la compañía en la creación de robots más autónomos y útiles en el día a día.

Los nuevos modelos están basados en Gemini 2.0 y representan una nueva etapa en la robótica. El primer modelo, Gemini Robotics, es un sistema avanzado de visión-lenguaje-acción (VLA) que permite a los robots realizar tareas físicas, ofreciendo un control directo sobre ellos.

Los robots con la IA
Los robots con la IA de Google pueden realizar tareas que pueden parecer complejas para otros robots. (YouTube: Google DeepMind)

Esto significa que los robots ahora no solo pueden “ver” y “entender” lo que ocurre a su alrededor, sino también ejecutar acciones físicas específicas en respuesta a esa información.

El segundo modelo, Gemini Robotics-ER, va un paso más allá al incorporar una comprensión espacial avanzada. Esto permite a los expertos en robótica desarrollar y ejecutar programas personalizados que aprovechan las capacidades de razonamiento incorporado de Gemini, lo que proporciona un mayor nivel de flexibilidad y precisión en las tareas.

Para el desarrollo de estos modelos, Google ha trabajado en colaboración con Apptronik para impulsar la próxima generación de robots humanoides. Además, la compañía ha establecido alianzas con un grupo selecto de probadores de confianza como Agile Robots, Agility Robots, Boston Dynamics y Enchanted Tools.

Los robots con la IA
Los robots con la IA de Google pueden manipular objetos de forma similar a un humano. (YouTube: Google DeepMind

Qué pueden hacer los robots con la IA de Google

Los robots con la inteligencia artificial de Google, específicamente con el modelo Gemini Robotics, son capaces de realizar una amplia variedad de tareas complejas, muchas de las cuales son impensables para los robots tradicionales.

Aprovechando su avanzada comprensión del mundo y su capacidad para generalizar a situaciones inéditas, estos robots pueden adaptarse a nuevos objetos, instrucciones y entornos sin necesidad de entrenamiento específico. Esto les permite llevar a cabo tareas nunca antes vistas, incluso aquellas que no formaban parte de su programación inicial.

Una de las principales ventajas de Gemini Robotics es su habilidad para interactuar de manera fluida con las personas y su entorno. El robot es capaz de entender y responder a comandos en lenguaje natural, lo que permite que las personas se comuniquen con él utilizando instrucciones cotidianas, ya sea en el idioma que elijan.

Además, Gemini Robotics monitorea constantemente su entorno, lo que le permite adaptarse de manera continua a los cambios. Si el entorno se modifica o una instrucción cambia, el robot ajusta su comportamiento en tiempo real, facilitando así su integración en diferentes escenarios, como en hogares, oficinas o fábricas.

Esta IA le permite a
Esta IA le permite a los robots la capacidad de responder ante los cambios que ocurran en su entorno. (YouTube: Google DeepMind)

En términos de habilidades motoras, Gemini Robotics también destaca. Aunque muchas tareas cotidianas que los humanos realizan sin esfuerzo requieren habilidades motoras finas y son difíciles para los robots tradicionales, Gemini Robotics ha superado este desafío.

Por ejemplo, imagina que el robot recibe una orden en lenguaje natural: “Por favor, pon los ingredientes en la mesa y coloca las verduras en la cesta”. Sin haber sido entrenado previamente para realizar esa tarea exacta, el robot es capaz de entender la instrucción.

Utilizando su comprensión avanzada del entorno, localiza los ingredientes en la cocina, identifica las verduras y las coloca en la cesta, adaptándose a los objetos de su entorno, incluso si son nuevos o han sido movidos desde su último uso.

Poco después, alguien le pide que acomode unos cubiertos en la mesa. Aunque la tarea es diferente a la anterior, el robot responde sin problemas, ya que su capacidad para generalizar le permite aplicar sus habilidades motoras finas de una tarea a otra, como alinear los cubiertos correctamente o doblar una servilleta de forma precisa.