Cómo elegir a los mejores trabajadores para una empresa, según Steve Jobs, fundador de Apple

La mente detrás de inventos como el iPhone o el iPad tenía una forma particular de liderar, un aspecto diferenciador que han destacado otras figuras como su sucesor, Tim Cook

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El empresario quería contar con
El empresario quería contar con personas que brindaran ideas fuera de lo convencional. (Foto: REUTERS)

La capacidad de una empresa para prosperar y alcanzar sus metas depende, en gran medida, de las personas que la conforman. En este sentido, Steve Jobs, fundador de Apple, comprendió la clave del éxito empresarial: contratar a personas con talento y brindarles la libertad de actuar, innovar y desafiar el statu quo.

Jobs sabía que el verdadero motor de su empresa no estaba en los procesos o estructuras rígidas, sino en las mentes creativas que trabajaban bajo su liderazgo. Según plasma el libro ‘Steve Jobs: Lecciones de liderazgo’ de Walter Isaacson, uno de los principios más importantes de Jobs era su enfoque hacia la contratación y la gestión de sus empleados.

Asimismo, Jobs solía afirmar: “No tiene sentido contratar a gente inteligente y luego decirles qué hacer; contratamos a gente inteligente para que nos digan qué hacer”. Este enfoque, radical para muchos, ponía énfasis en la autonomía de los empleados, lo que fomentaba una cultura de innovación y desafiaba las expectativas convencionales sobre el liderazgo.

Por qué la confianza en los trabajadores es clave para el éxito de una empresa

Apple es un referente de
Apple es un referente de cómo aprovechar al máximo el potencial del conocimiento humano. (Foto: REUTERS/Gonzalo Fuentes/File Photo)

La confianza fue según Jobs, uno de los pilares fundamentales de su enfoque hacia la creación de grupos de trabajo. El empresario estaba convencido de que los líderes deben tener fe en las capacidades de sus empleados.

Durante una entrevista con la revista Rolling Stone dijo: “Lo importante es que tengas fe en las personas, en que son básicamente buenas e inteligentes, y que si les das herramientas, harán cosas maravillosas con ellas”.

Al brindarles autonomía, Jobs permitiría a sus empleados pensar más allá de los límites establecidos, impulsando su capacidad de resolver problemas de manera innovadora.

Con esta guía Apple comenzó
Con esta guía Apple comenzó a diferenciarse en el mercado tecnológico. (Foto: REUTERS)

No solo se trataba de darles la libertad para crear, sino de crear un ambiente donde cuestionar las ideas previas, incluso las propias de Jobs, fuera no solo aceptado, sino incentivado. Este enfoque colaborativo y abierto a la crítica se convirtió en una característica distintiva de Apple.

Qué debe integrar una cultura corporativa

Jobs entendía que la innovación surge cuando se cuestionan las normas establecidas. Durante años, su liderazgo en Apple se caracterizó por una cultura de disrupción constante, en la que los empleados no temían desafiar el statu quo.

Según lo narrado por Isaacson, Jobs empoderaba a sus empleados, de tal manera que fomentar la contradicción y el cuestionamiento era visto como un signo de valentía y creatividad.

Jobs pedía que los productos
Jobs pedía que los productos no fueran iguales a la competencia. (Foto: REUTERS)

Jobs se preocupaba por crear una atmósfera donde los empleados pudieran cuestionarlo a él mismo si lo consideraban necesario. Esta filosofía no solo fomentó la creatividad, sino que permitió que Apple revolucionara industrias enteras con productos como: el iPhone y el iPad.

Además, Jobs no veía el “fracaso” como una opción, sino como un paso inevitable en el proceso de innovación. Si un producto no cumplía con los estándares de excelencia que él tenía en mente, se revaluaba y se mejoraba sin reservas.

Cómo influyó las lecciones de Steve Jobs en Tim Cook, actual CEO de Apple

Cook duró más de una
Cook duró más de una década como mano derecha de Jobs. (Foto: REUTERS/Stephen Lam/File Photo)

La influencia de Jobs en su sucesor, Tim Cook, fue decisiva para la evolución de Apple tras su retiro y muerte. Cook, quien trabajó junto a Jobs durante más de una década, antes de ocupar su cargo, ha dicho en varias entrevistas cómo aprendió del fundador de Apple sobre la valentía que se debe tener para aceptar los errores.

En particular, destacó la forma en que Jobs desafiaba las ideas preconcebidas, incluidas las propias. Esta flexibilidad mental fue una de las lecciones más valiosas que Cook aprendió, y es un principio que ha seguido aplicando en la gestión en la organización.

El énfasis de Jobs en la innovación y el diseño tuvo una fuerte repercusión en el liderazgo de Cook. Jobs quería que los productos funcionaran bien y que fueran estéticos y fáciles de usar. Este principio fundamental sigue guiando la estrategia de Apple, siendo uno de los elementos clave de su impacto a largo plazo.