Cuánto cuesta cargar un carro eléctrico en España

Los coches eléctricos se han convertido en una opción para algunos conductores, mientras que otros aún no se deciden a adquirir uno, quizás por desconocer el costo de cargarlo. En esta situación, es importante tener en cuenta dos que se puede cargar el automóvil desde casa o en un punto de carga.

Cargar un coche eléctrico en casa suele ser más económico, ya que se utiliza la tarifa eléctrica doméstica, aunque el costo dependerá de la tarifa contratada con la empresa suministradora de energía. Por otro lado, los puntos de carga públicos, aunque más rápidos, tienden a tener tarifas más elevadas y pueden depender de la ubicación y el operador del servicio.

Esto significa que, si bien los coches eléctricos pueden resultar más baratos en términos de mantenimiento y consumo energético a largo plazo, es esencial considerar estos factores al momento de calcular el gasto total de uso.

El coste de instalar un punto de recarga en tu hogar es un gasto inicial y fijo, que debe considerarse como una inversión que te permitirá ahorrar a largo plazo.

El precio varía según el modelo del cargador y las características del inmueble, ya que existen diversas marcas y gamas disponibles en el mercado. Sin embargo, puedes encontrar un punto de recarga desde unos 500 euros, explica Iberdrola, empresa energética española.

Los cargadores domésticos para coches eléctricos son generalmente de Nivel 2 (230 V), lo que implica la necesidad de una instalación eléctrica especializada y proporciona una carga más eficiente. El precio de estos cargadores oscila entre los 400 y 1.200 euros, y la instalación adicional puede costar entre 500 y 1.500 euros, dependiendo de la complejidad del trabajo y de las tarifas locales, explica la compañía.

En consecuencia, una recarga en casa de 40 kWh, con el precio del kWh a 0.37 €, puede tener un coste de aproximadamente 14,8 €, lo que te permitirá recorrer unos 270 km.

Hay que tener en cuenta que este precio puede variar, ya que el costo de la electricidad fluctúa constantemente, tanto a lo largo del día como según la hora de la recarga.

Los cargadores públicos se encuentran en lugares como aparcamientos de supermercados, centros comerciales, hoteles, entre otros. Según la normativa española, se requiere que haya un punto de recarga por cada 40 plazas de aparcamiento, tanto en espacios públicos como privados.

El precio promedio de la carga oscila entre 0,15 €/kWh y 0,79 €/kWh, dependiendo del tipo de carga. Así, si cuentas con un coche eléctrico de autonomía completa y una batería de 40 kWh de capacidad, cargarla por completo te costaría alrededor de 20 €, lo que te permitiría recorrer unos 270 km de media, de acuerdo con lo que recoge la empresa energética mencionada.

La capacidad de carga de un coche eléctrico depende de varios factores clave. El principal es la capacidad de la batería, medida en kWh, que determina la cantidad de energía que puede almacenar y la autonomía del vehículo.

A mayor capacidad, mayor distancia recorrida por cada carga. El tipo de cargador utilizado influye significativamente. Los cargadores de nivel 1 son los más lentos, mientras que los de nivel 2 ofrecen una carga más rápida y los de nivel 3, de corriente continua, permiten una carga aún más veloz.

Otro factor importante es la potencia de carga del vehículo, que limita la velocidad de carga, incluso si se usa un cargador rápido.

La temperatura ambiental también afecta la eficiencia de la batería, ya que las condiciones extremas pueden ralentizar el proceso de carga. Además, el estado de la batería influye en su capacidad, ya que con el tiempo y el uso, las baterías se degradan, reduciendo tanto la autonomía como la velocidad de carga. Por último, el sistema de gestión de la batería (BMS) optimiza estos procesos para maximizar la vida útil del vehículo.