Este es el proceso ideal para apagar tu portátil de manera adecuada y evitar que se dañe

Una de las prácticas que hay que evitar es desconectar la corriente repentinamente, porque puede dañar el sistema operativo y hardware del dispositivo

Guardar
Apagar correctamente una laptop preserva
Apagar correctamente una laptop preserva su rendimiento y prolonga su vida útil. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El correcto apagado de una computadora portátil es un proceso esencial que muchos usuarios pasan por alto. Este pequeño detalle puede tener un impacto en el rendimiento y el tiempo de vida útil del dispositivo. Por eso es crucial aprender las mejores prácticas para hacerlo con cuidado.

También es clave que los usuarios de laptops con Windows conozcan las diferencias entre apagar, suspender e hibernar, ya que saber administrar estas opciones también ayudará a evitar errores que afecten la duración del computador.

Cómo es el apagado correcto de un computador portátil

El apagado de una computadora portátil debería seguir siempre un proceso adecuado que implique el uso del sistema operativo para asegurar que todos los programas y procesos se cierren correctamente. Esto no solo evita la pérdida de datos, sino que también protege los componentes internos del equipo.

  • Cerrar todas las aplicaciones abiertas: antes de apagar el equipo, es crucial cerrar todos los programas y documentos. Esto evitará la pérdida de información no guardada y permitirá que el sistema cierre todos los procesos abiertos de manera controlada. Ignorar este paso puede resultar en la corrupción de archivos o la pérdida de datos importantes.
Cerrar todas las aplicaciones abiertas
Cerrar todas las aplicaciones abiertas antes del apagado evita pérdida de datos y corrupción de archivos. (Imagen Ilustrativa Infobae)
  • Acceder al menú de apagado: el método más seguro para apagar la computadora es a través del menú del sistema operativo. En Windows, basta con hacer clic en el botón de inicio, seleccionar el icono de encendido y luego elegir la opción “Apagar”. En Mac, el procedimiento es similar, se utiliza el menú de Apple y se selecciona “Apagar”. De esta manera, el sistema operativo realiza un apagado gradual y seguro, cerrando todos los procesos de manera ordenada.
  • Esperar que el sistema complete el apagado: un error común es presionar el botón de encendido de nuevo antes de que la computadora haya terminado de apagarse. Es importante esperar a que la pantalla se apague por completo para asegurarse de que el proceso de cierre se haya realizado correctamente. Interrumpir este proceso podría resultar en daños al sistema operativo o a los archivos del usuario.

Cómo saber elegir entre suspensión e hibernación

Además del apagado completo, los sistemas operativos de las laptops ofrecen dos opciones que consumen menos energía: el modo de suspensión y el modo de hibernación. Aunque ambos permiten que el usuario vuelva rápidamente a su trabajo, es esencial entender las diferencias para utilizarlos correctamente según las necesidades.

  • Suspensión

El modo de suspensión es ideal cuando el usuario planea alejarse de la computadora por un corto período. En este estado, el sistema se coloca en un modo de bajo consumo, deteniendo todas las acciones pero manteniendo las aplicaciones y documentos abiertos en la memoria. Este modo permite reanudar rápidamente el trabajo cuando se vuelve a encender la laptop, ya que todo se restablece casi de inmediato.

Esperar a que el proceso
Esperar a que el proceso de apagado finalice protege el sistema operativo y los archivos. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Para poner una laptop con Windows en modo de suspensión, basta con hacer clic en el botón de inicio, seleccionar “Apagar” y luego elegir “Suspender”. Si el equipo no responde a la suspensión automáticamente, se puede acceder al “Panel de Control” y ajustar la configuración de los botones de inicio/apagado para que el equipo entre en suspensión al presionar el botón de encendido.

La principal ventaja del modo de suspensión es la velocidad con la que la computadora reanuda su funcionamiento. Sin embargo, este modo sigue utilizando algo de energía, por lo que no es adecuado para periodos prolongados sin uso. Además, si la batería de la laptop se agota mientras está en suspensión, el sistema se apaga, lo que podría generar pérdida de datos si no se ha guardado correctamente.

  • Hibernación

El modo de hibernación es similar al de suspensión, pero con una diferencia clave: mientras que la suspensión mantiene los datos en la memoria RAM, la hibernación los guarda en el disco duro. Esto significa que la computadora utiliza prácticamente cero energía cuando está en hibernación, y al reanudarse, todo vuelve exactamente a donde se dejó, con un tiempo de reanudación ligeramente más largo que en el modo de suspensión.

Para habilitar el modo de hibernación, se debe acceder al “Panel de Control”, luego seleccionar “Hardware y sonido”, y en la sección de “Opciones de energía”, activar la opción de hibernación en el menú desplegable correspondiente.

La suspensión permite reanudar el
La suspensión permite reanudar el trabajo de una laptop rápidamente pero consume energía. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La hibernación es la mejor opción cuando no se planea usar la computadora durante un largo período y se desea ahorrar energía. A diferencia de la suspensión, la hibernación no requiere de energía alguna una vez activada, lo que la hace ideal para ahorrar batería en laptops. Sin embargo, el proceso de reanudación es más lento en comparación con la suspensión.

Los hábitos que hay que evitar para no afectar el computador

Aunque el apagado, suspensión e hibernación son opciones válidas según las necesidades del usuario, hay errores comunes que pueden causar daños al hardware y software del equipo. Entre ellos, los más graves son:

  • Desconectar la corriente: apagar la computadora desconectándola de la fuente de alimentación o simplemente presionando el botón de encendido de manera abrupta puede generar daños a los archivos del sistema operativo. Este método puede dañar permanentemente los componentes internos, como la memoria o el disco duro.
  • No cerrar las aplicaciones: ignorar el cierre adecuado de programas y documentos antes de apagar el equipo puede resultar en la pérdida de datos no guardados, así como en la corrupción de archivos importantes.
  • No instalar actualizaciones: algunas computadoras requieren actualizaciones del sistema operativo o de programas antes de apagarse. Ignorar estos avisos puede comprometer el funcionamiento y la seguridad del equipo.