Cargar el celular por las noches: ¿buena idea o error fatal?

Algunas personas tienen la costumbre de dejar cargando su teléfono móvil durante la noche mientras descansan, ya que lo consideran una opción eficiente. Sin embargo, esta práctica podría no ser tan beneficiosa para la batería del celular.

Según explica Movistar en un blog publicado en su página web, las baterías de los celulares se deterioran con el uso y el paso del tiempo. Esto significa que, con el tiempo, pierden capacidad para almacenar energía y se vuelven menos eficientes.

Indican que existen tres factores principales que aceleran el desgaste de las baterías de iones de litio utilizadas en los teléfonos móviles: la temperatura, la cantidad de ciclos de carga y la antigüedad del dispositivo.

En cuanto a la cantidad de ciclos de carga, una de las dudas más frecuentes es determinar el mejor momento para recargar el móvil. O, dicho de otra manera, con qué porcentaje de batería restante es recomendable enchufarlo para optimizar su vida útil. Dado que cuantas más veces se recarga la batería, más rápido se desgasta, es fundamental seguir algunas recomendaciones.

Lo ideal es mantener la carga de la batería entre el 20% y el 80% la mayor parte del tiempo. Se puede recargar cuando el nivel de batería caiga por debajo del 50%, pero es importante desconectarlo antes de que alcance el 100%.

Por esta razón, dejar el teléfono cargando durante toda la noche podría no ser la mejor opción para prolongar la vida útil de la batería.

Otra razón para evitar dejar el teléfono cargando durante la noche es la seguridad. Mantener el dispositivo conectado durante varias horas puede generar sobrecalentamiento, especialmente si se encuentra sobre superficies blandas como una cama o un sofá, lo que aumenta el riesgo de incendio.

Aunque los teléfonos modernos cuentan con sistemas de protección contra sobrecarga, fallas en el cargador, el cable o la batería pueden provocar cortocircuitos. Además, el uso de cargadores de baja calidad o no originales incrementa el peligro.

• Evitar el calor excesivo.

Las temperaturas elevadas aceleran la degradación de la batería. No se debe exponer el teléfono directamente al sol ni dejarlo en lugares cerrados con calor, como un automóvil. También es recomendable evitar el uso del móvil mientras se carga, ya que esto genera calor adicional.

• Usar cargadores y cables originales.

El uso de cargadores de baja calidad o no certificados puede afectar la eficiencia de la carga y provocar daños en la batería que en ocasiones son irremediables. Los fabricantes diseñan cargadores específicos para cada modelo de teléfono, por lo que siempre es preferible optar por accesorios originales o de marcas certificadas.

• Apagar el teléfono ocasionalmente.

Reiniciar o apagar el dispositivo al menos una vez a la semana permite que el sistema operativo y la batería funcionen de manera más eficiente, de hecho, Movistar recomienda apagar el teléfono una vez al día por lo menos por 15 minutos. Esto ayuda a liberar procesos en segundo plano que pueden generar un consumo innecesario de energía.

• No abusar de la carga rápida.

Aunque la carga rápida es conveniente, su uso frecuente puede generar un mayor estrés en la batería debido a la cantidad de energía que recibe en poco tiempo. Es preferible usar una carga estándar siempre que sea posible.

• Evitar dejar la batería en 0% por largos períodos.

Si el teléfono no se va a usar durante un tiempo prolongado, lo mejor es almacenarlo con un nivel de carga entre el 50% y el 70%. Dejarlo completamente descargado durante semanas o meses puede ocasionar que la batería pierda su capacidad de retención de energía de forma permanente.