Nuevo caso de un dispositivo que explotó y estuvo a cerca de causar una tragedia. Esta vez el protagonista es un mouse de la marca Gigabyte, que se incendió repentinamente en la casa de un usuario, llenando la habitación de humo negro y dejando daños materiales importantes.
A pesar de tratarse de un dispositivo aparentemente inofensivo, sin batería ni fuente de energía capaz de generar un incendio, el incidente se produjo en circunstancias inexplicables que han abierto interrogantes sobre la seguridad de los dispositivos electrónicos antiguos.
Qué pasó con el mouse que se explotó
La historia comenzó cuando un usuario de Reddit, bajo el nombre de lommelinn, compartió imágenes del ratón calcinado en el canal de PC Master Race. Según explicó, todo ocurrió en las primeras horas de la mañana, mientras dormía.
“Olí humo temprano esta mañana, así que corrí a mi habitación y encontré mi ratón de ordenador ardiendo con grandes llamas. El humo negro llenó la habitación”, relató en su publicación.
El usuario actuó rápidamente para apagar el fuego, evitando una tragedia mayor, pero no sin consecuencias: inhaló una gran cantidad de humo tóxico en el proceso. Además, mencionó que la habitación quedó en muy mal estado, con muebles y objetos personales cubiertos por partículas negras, incluidos equipos valiosos como su sintetizador modular.
Afortunadamente, las llamas no alcanzaron elementos inflamables como las cortinas o la ropa, lo que habría podido convertir el incidente en un incendio de mayores proporciones.
El ratón en cuestión era un modelo antiguo, el Gigabyte M6880X, un dispositivo óptico con cable que se alimenta exclusivamente a través de una conexión USB. Este detalle es particularmente relevante, ya que elimina la posibilidad de que el incendio se haya originado por una batería defectuosa, como ocurre en otros casos de dispositivos electrónicos que explotan.
El gran misterio del mouse que se incendió
La peculiaridad de este caso radica en la falta de una explicación clara para el incendio. El ratón no contaba con baterías ni acumuladores de energía, y el cable USB que lo alimentaba estaba conectado a un ordenador apagado en el momento del incidente.
Técnicamente, los cables USB solo suministran una corriente de 5 voltios y 0,5 amperios, insuficientes para generar un incendio o provocar un sobrecalentamiento extremo.
Las imágenes publicadas por lommelinn mostraron el estado en que quedó el dispositivo: completamente destruido por las llamas. Esto complicará la investigación, ya que los componentes internos del ratón quedaron calcinados, lo que dificulta identificar la causa exacta del accidente.
En Reddit los comentarios apuntan a diferentes hipótesis. Algunos usuarios plantearon teorías que iban desde un cortocircuito interno, un cable defectuoso o envejecido, hasta una posible acumulación de corriente por soldaduras dañadas.
Incluso se llegó a discutir la posibilidad de que un cristal dentro del dispositivo haya actuado como una lupa, concentrando la luz de una lámpara y generando calor. Sin embargo, este escenario fue descartado, ya que el incendio ocurrió de noche, cuando no había luz solar que pudiera reflejarse.
Otra hipótesis que circuló fue la de un componente envejecido que, tras años de uso, pudo haber fallado de manera crítica. No obstante, ninguna de estas explicaciones logra justificar plenamente cómo un dispositivo conectado a un cable USB de baja potencia y con el ordenador apagado pudo generar llamas tan intensas.
Ante la viralización del caso, la empresa Gigabyte, fabricante del ratón M6880X, emitió un comunicado oficial a través del usuario AORUS_Official en Reddit, donde aseguraron estar al tanto del incidente y se comprometieron a investigar a fondo lo sucedido.
“La seguridad de nuestros clientes es nuestra máxima prioridad y estamos investigando activamente este caso. Nuestro equipo se ha puesto en contacto con lommelinn para ofrecerle apoyo e investigar el asunto completamente. Agradecemos la comprensión y paciencia de la comunidad mientras trabajamos para solucionar este problema”, afirmó la empresa.
El fabricante también solicitó al usuario que les enviara el dispositivo quemado para realizar análisis técnicos. Sin embargo, el estado en que quedó el ratón podría dificultar significativamente la investigación.