El Papa defiende una Iglesia sinodal que "se ensucia las manos" y no esté "paralizada" en la misa de clausura del Sínodo
Durante la misa de clausura del Sínodo sobre la Sinodalidad, el Papa Francisco aboga por una Iglesia activa y comprometida con el sufrimiento humano, destacando la importancia de la participación y el servicio